Sobreproteger a tu hijo adolescente te puede hacer sentir más seguro y en control de su vida pero probablemente le estés causando problemas al adolescente. Los jóvenes siempre buscan más independencia y autonomía de sus papás y les puedes causar frustración si los controlas demasiado.

Falta de habilidad

Si a tu hijo adolescente lo crías con supervisión constante, es posible que le estés mandando un mensaje de ser una persona inútil e incapaz de hacer las cosas. Probablemente no expresen esto, de hecho es posible que no se percate de los sentimientos negativos asociados con la sobreprotección de sus padres. Si el adolescente crece pensando que no puede resolver nada sin su ayuda, puede desarrollar una baja autoestima muy grave.

Indigno de confianza

Los adolescentes deben crecer más independientes a través de los años para prepararse a vivir solos. Mientras que esta etapa sucede, los papás deben darles más libertad gradualmente y también permitir que asuman más responsabilidades. Si no logras darle este espacio al joven vas a crear un ambiente de desconfianza entre el adolescente y tu. Si el adolescente siente que no es digno de tu confianza, se va a distanciar emocional y físicamente, según "Sunrise Residential Treatment Program".

Dependencia

Otra reacción que los adolescentes pueden sufrir cuando están sobreprotegidos es cuando crean una dependencia obsesiva con los padres. El joven se siente tan paralizado por esta falta de confianza que quizás se negará a realizar actividades con independencia o hasta tomar decisiones. Esta situación es muy común entre los jóvenes que dejan de vivir con sus padres para ir a la universidad. En estos casos el adolescente no interactúa con los demás ni es capaz de encontrar su vocación. La sobreprotección genera que otros jóvenes se vuelvan irresponsables cuando salen de casa de su padres. Esta situación se puede detectar cuando el joven no afronta sus responsabilidades o no se viste acorde a su edad. Los padres cometen un error cuando tratan a los adolescentes como niños pequeños y les resuelven la vida; así no les dan oportunidad a que cometan errores.

Miedo

Si sobreproteges a tu hijo por miedo o ansiedad de que le suceda algo, el miedo que sientes se lo vas a transmitir y lo va a reflejar en sus decisiones y sus acciones. Aunque algunos adolescentes se resisten a la ansiedad distanciándose de sus padres, otros adoptan esa inseguridad. Las advertencias continuas hacia el joven pueden causar más daño que beneficios para el.