Ubicación

Hasta la llegada de los exploradores y conquistadores europeos, la mayoría de los guaraníes habitaban la zona entre Uruguay y los ríos bajos de Paraguay en el Paraguay actual, así como también en partes de Argentina. Las poblaciones actuales existen en Brasil, Uruguay, Argentina y Bolivia, mientras que la parte más grande quedó en Paraguay.

Historia

El encuentro inicial entre las tribus guaraníes y extranjeros ocurrió alrededor del año 1537, cuando Gonzalo de Mendoza fundó la futura capital de Paraguay. Los indígenas fueron esclavizados por los colonos extranjeros. A partir de 1585, los misioneros jesuitas establecieron residencias y escuelas en el lugar. En 1608, el rey de España le concedió permiso a los jesuitas para convertir a los guaraníes, quienes los liberaron así de la esclavitud. Sin embargo, los propietarios de la trata de esclavos persistieron por décadas atacando las misiones y asesinando o capturando a los guaraníes. A finales del año 1630, el Papa prohibió la esclavitud de los indígenas y permitió la enseñanza impartida por los jesuitas, mientras que el rey de España concedió a los guaraníes el permiso para portar armas. Esto dejó como resultado una década de paz para los guaraníes antes de la guerra entre España y Portugal como resultado de los nuevos ataques sobre ellos. Alrededor de 1732, los guaraníes y los jesuitas tenían bien instalada la defensa de sus misiones. Cuando la mayoría de los jesuitas se retiraron a finales del siglo XVIII, comenzó la declinación de las tribus misioneras guaraníes. Muchos de ellos volvieron a su vida de agricultura en el bosque o se mudaron a las ciudades. En 1848, todos los restantes guaraníes fueron declarados ciudadanos de Paraguay.

Agricultura

Las tribus guaraníes originales y aquéllas que aún existen son agricultoras, y cultivan maíz, té y mandioca (de la que se crea la tapioca). Aún practican la agricultura comunitaria en áreas remotas mientras que algo de caza y pesca integran su dieta.

Cultura y lenguaje

Cuando los extranjeros llegaron por primera vez, los guaraníes vivían en aldeas comunales, con muchas casas grandes en las que se acomodaban de 10 a 15 familias. La música es una parte importante de su vida, y usaban flautas e instrumentos de percusión para expresar creencias religiosas y los sonidos de su tierra. Las tribus guaraníes eran y siguen siendo hábiles tejedoras, talladores de madera y alfareros. Aunque no se consideran personas que hablan mucho, el lenguaje guaraní es expresivo. Debido a la gran población de indios guaraníes en Paraguay, el guaraní es el segundo lenguaje oficial en el país, junto con el español.