Las raíces de mis orquídeas están marchitas y las hojas se están cayendo

Uno de los errores más comunes es el exceso de riego a la planta.

Medioimages/Photodisc/Valueline/Getty Images

Las orquídeas son plantas delicadas que requieren paciencia y atención. Los floricultores cultivan orquídeas por su belleza, mientras que algunas personas las cultivan para un desafío. En cualquier caso, cultivar orquídeas lleva una cuidadosa planificación y acción. Algunos signos de orquídeas afligidas son las raíces marchitas y las hojas caídas. Existen pocas soluciones y explicaciones de porqué esto ocurre.

Hojas caídas

La caída de las hojas en la orquídea es común ya que la planta crece. Las hojas inferiores de la orquídea phalaenopsis tienden a caerse, seguido a nuevas hojas de crecimiento. Luego de que algunas orquídeas florecen, algunas hojas se caen también. Las hojas caídas de la orquídea son sólo una preocupación cuando previamente se han vuelto de color amarillo o marrón. Si fueron las hojas más grandes y más maduras, no es una buena señal. Una orquídea sin hojas está muerta.

Hongo y bacteria

Los hongos son factores que contribuyen a la caída de las hojas. Las manchas negras en las hojas indican hojas en descomposición causado por la infección fúngica. Los hongos son probablemente colletotrichum o cercospora. Las hojas maduras que se vuelven amarillas y caen son un signo de que un hongo u otra cepa bacteriana esta matando a la planta. Los bactericidas o fungicidas en aerosol ayudan a prevenir y evitar las infecciones. Controla regularmente las orquídeas para observar decoloración o manchas en las hojas.

Exceso de riego

Las raíces de la orquídea están compuestas por un material esponjoso que almacena agua. Además de necesitar agua, las raíces de la orquídea también necesitan aire. Un error común de los cultivadores de orquídeas es regar demasiado a la planta, lo que ahoga las raíces. Controla el exceso de riego observando las raíces de la orquídea. Si las raíces están blandas y marrones, probablemente tengan un riego excesivo. La mejor solución es un suelo bien drenado. Esto mantiene el entorno de la raíz bastante seco mientras que proporciona a la planta la suficiente humedad e hidratación. Trasplanta las orquídeas con exceso de riego en un suelo con buen drenaje si la planta aún permanece firmemente arraigada y de pie.

Tierra compactada

Además del exceso de riego, la tierra compactada sofoca a las orquídeas. Al igual que demasiada agua no permite que el aire llegue a las raíces, el suelo compacto impide lo mismo. Proporcionar a la orquídea un suelo suelto y grueso soluciona este problema. Las orquídeas a menudo son empaquetadas con suelo específicamente diseñado para drenar bien y permitir que una adecuada cantidad de aire llegue a las raíces. Si la orquídea no tiene este tipo de suelo, encuentra la tierra específica en línea y en centros de jardinería.

eHow en espanol
×