Lo fundamental

Step 1

Apréndete la lista de la liturgia de las horas. El invitatorio es lo primero que se reza; el oficio de las lecturas viene a continuación. Las oraciones que corresponden a la mañana, al mediodía, a la tarde y a la noche, cada una se reza durante la parte del día que corresponda.

Step 2

Echa un vistazo al breviario para que te sea más familiar.

Step 3

Presta especial atención al salterio de la semana cuatro, que sería el centro del breviario y que incluye el texto de las oraciones, que se necesitan para la liturgia de las horas.

Un ejemplo: la oración de la mañana

Step 1

Comienza con la oración de apertura, que en general, viene antes del himno.

Step 2

Recita o canta la antífona, el salmo y luego una vez mas la antífona. Sigue este ritmo tres veces. A veces, uno de los salmos se reemplaza por otro parecido, de otro libro de la Biblia.

Step 3

Lee el pasaje de la Biblia que corresponda a ese día y hora.

Step 4

Reza el responsorio, que es de tres versos y que se basa en llamar y responder.

Step 5

Continúa con el cántico. Por ejemplo, para la oración de la mañana siempre se usa el de Zacarías. Recuerda que nunca debes olvidar rezar una antífona antes y después.

Step 6

Intercede por la Iglesia. Las oraciones de la mañana y de la tarde tienen este tipo de mediaciones después del cántico.

Step 7

Termina el rezo con la oración de clausura.

En otras horas

Step 1

Empieza tu día de rezo con el invitatorio, que es sencillamente un grupo de antífonas y un salmo.

Step 2

Reza el oficio de las lecturas tal y como lo hiciste en la oración de la mañana, con excepción de unos pocos ajustes nada más. Hay dos lecturas, una de la Biblia y otra de un escrito de la iglesia. En lugar del cántico, se reza El Tedeum, mientras que los salmos vienen de otro salterio, que es específico del Oficio de las Lecturas.

Step 3

Utiliza lo que ya aprendiste para la oración de la mañana, para hacer la de la tarde. La única diferencia reside en el cántico.

Step 4

Reza la oración del mediodía de la misma manera que la de la mañana y la de la tarde. Hay que tener en cuenta que es más corta porque son sólo tres salmos con antífonas. La de la noche es incluso más pequeña, ya que sólo tiene uno o dos salmos y no cuenta con ninguna intervención. Sin embargo, para este rezo se agrega un examen de conciencia antes de comenzar.

Step 5

Deberás modificar las oraciones durante algunas fiestas y ciertos períodos que celebra la iglesia cristiana. En el frente del breviario, hay antífonas que reemplazan a las que se leen siempre, y que funcionan durante la época del Adviento, la Cuaresma y la Pascua. A estas nuevas oraciones, específicas para estas épocas, se las conoce como las apropiadas. Cada domingo también tiene la suya particular. En la parte de atrás del breviario encontrarás los cambios que se necesitan para las fechas festivas de algunos santos.