¿Los silbatos para perros, funcionan en gatos?

Los gatos pueden oír mejor que los humanos y los perros.

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Un silbato de perro también es conocido como un silbato Galton por su inventor Francis Galton. El estudió las frecuencias auditivas de los humanos y otros animales en su libro "Inquiries into Human Faculty and Its Development". En este libro, Galton estableció que los gatos tenían oídos más sensibles que los perros y que eran capaces de oir frecuencias de sonido más altas que los humanos e incluso los perros. Los silbatos caninos suelen usarse para reemplazar órdenes verbales como sentarse o venir. El silbato tiene una ventaja sobre las voces humanas porque su alta frecuencia es más probable que capte la atención de los animales y puede ser oído desde distancias más grandes.

La física del sonido

El sonido comienza como una ola de presión. Cuando una de esas olas pasa a través de un objeto sólido, líquido o gas, causa una vibración. La vibración produce sonido. Que alguien o algo sea capaz de oir el sonido depende de la frecuencia, o de cuan rápidas sean los olas. La frecuencia de sonido se mide en hertz (Hz)

Audición felina vs audición canina

Un ser humano puede tener un rango auditivo de 64 a 23.000 Hz, pero el promedio de audición es de 20 a 20.000 Hz. Los perros tienen un rango entre 67 y 45.000 Hz, lo cual significa que pueden oir mejor que los humanos. Los gatos oyen todavía mejor. Su capacidad de ir es de entre 45 y 64.000 Hz.

Cómo funcionan los silbatos para perros

Los silbatos de perro son considerados dispositivos ultrasónicos. Ultrasónico es simplemente una palabra elegante que significa algo que hace un sonido por encima del rango auditivo humano. En este caso, un silbato de perro produce un sonido que está entre 16.000 y 22.000 Hz, lo cual significa que tanto perros como gatos pueden oírlo cuando se lo sopla.

¿Pueden los gatos ser entrenados para responder a un silbato?

Cualquier persona que tenga un abrelatas eléctrico y un gato expuesto a comida de gatos enlatada sabe que estos animales pueden ser entrenados para acercarse cuando escuchen un sonido. Entrenarlos para que se acerquen al silbato no es diferente a por qué responden al sonido del abrelatas: el gato ha aprendido que cosas buenas pasan cuando escucha ese sonido. Comienza cerca de tu gato. Sopla el silbato y luego dale una recompensa. Eventualmente, muévete unos pies más atrás y haz que tu gato se acerque por la recompensa. Repite estos pasos hasta que tu gato vaya hacia ti aún si no puede verte. Eventualmente, puedes evitar la recompensa y simplemente elogia al gato cuando responda.

¿Por qué no hacen silbatos para gatos?

Las personas usualmente no entrenan a sus gatos pero casi siempre entrenan a sus perros. Como evidencia de esto, ve a cualquier tienda de libros y busca en la sección de mascotas. Aunque hay varias filas de libros sobre entrenamiento de perros, hay solo uno o dos títulos sobre entrenamientos de gatos. Así que los fabricantes de silbatos simplemente están promocionando el producto hacia quienes están comprando.

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