Sistemas de roles disfuncionales en las familias

Los miembros de la familia adoptan roles con los que se identifican para poder soportar la disfuncionalidad.

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Una familia disfuncional es una unidad familiar que no satisface las necesidades emocionales de sus miembros. Las situaciones temporarias pueden afectar la dinámica familiar por un período breve, sin embargo, los problemas crónicos como el alcoholismo y el abuso de sustancias, las enfermedades mentales y unos padres controladores o abusivos moldean permanentemente los métodos por los cuales los miembros de la familia lidian con el problema central. Para funcionar en una familia disfuncional, los miembros de la familia pueden adoptar ciertos roles característicos. Estos roles funcionan como distracción del problema central que aqueja a la unidad familiar.

El chivo expiatorio

Los padres culpan al chivo expiatorio por sus problemas familiares.

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El chivo expiatorio, normalmente el hijo mayor, es el miembro de la familia que soporta la acusación de ser la causa de los problemas de la familia. En lugar de tomar responsabilidad por sus propias acciones los padres culpan al hijo como chivo expiatorio. La función de este rol es distraer la atención del problema principal. El foco se traslada desde los problemas de los padres que crean conflictos al mal comportamiento del chivo expiatorio y sus acciones como una fuente de problemas. Debido a que sólo recibe atención negativa, el chivo expiatorio tiende a hacer malas elecciones en su vida, que resultan en aún más atención negativa. Cuando el chivo expiatorio abandona el hogar, otro hijo heredará su rol.

El héroe

El héroe soporta y mantiene la apariencia de una familia normal.

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El héroe distrae la atención del problema central al otorgar a los terceros la ilusión de que la familia es funcional y normal. El héroe funciona como una falso reflejo de los padres y de la unidad familiar. Los padres creen que son buenos padres porque han criado un hijo sobresaliente. El héroe soporta la fachada de una imagen de familia positiva en la comunidad. Debido a la constante atención positiva que recibe, el héroe se vuelve muy crítico de sí mismo, busca la perfección y teme el fracaso en la vida.

El bufón

El bufón usa la comedia y las travesuras para aliviar la tensión familiar.

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El bufón es el payaso de la familia, que ilumina el tono sombrío en la casa durante momentos de tensión. El bufón distrae temporalmente la atención del problema central al infundir humor y risas en una familia que sufre de dolor y resentimiento. Muchos comediantes profesionales aprendieron su oficio al aportar alivio humorístico en sus familias disfuncionales. El cómico tiende a ser inmaduro y se apoya en el humor y en las travesuras para evitar las emociones.

El hijo perdido

El hijo perdido no demanda atención ni positiva ni negativa de los padres, y a menudo se lo olvida.

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El hijo perdido, normalmente el menor, es el hijo perfecto que no crea problemas o actúa de manera de atraer la atención de los padres. Los padres ven al hijo perdido como perfecto, porque no demanda ningún tipo de atención negativa ni positiva, volviéndose esencialmente invisible en la familia. El héroe y el chivo expiatorio distraen la atención de los padres del hijo perdido. El hijo perdido tiende a tener sensibilidad artística y usa el arte como un escape emocional. También es muy inteligente para ocultar sus emociones, a menudo evitando las relaciones sentimentales.

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