Step 1

Planea tu proyecto. Mira el cemento que quieres teñir y determina si sólo quieres aplicarle un color o si quieres crear un patrón. Selecciona el color o los colores del tinte que desees usar. Encuentra muestras en salones de exposición, en línea y en tiendas de mejora del hogar.

Step 2

Compra tu tinte, los suministros para aplicarlo, los de seguridad y el limpiador de cemento. Encuentra todo en tu tienda de mejora del hogar local o en tu tienda de tintes para cemento.

Step 3

Prueba una pequeña sección de tu cemento para asegurarte de que aceptará el tinte. Pon cinta en una pequeña esquina y aplica algo de tinte. Déjalo durante la noche y mira su aspecto al día siguiente. Si la saturación del color sigue estando bien, tu cemento aceptará el tinte y puedes continuar con tu proyecto. Si la saturación se ha desvanecido de forma significativa, tienes que quitar el sellador del cemento y lijarlo para que el tinte pueda penetrar. Haz otra prueba y procede a teñir.

Step 4

Prepara tu cemento para la aplicación del tinte. Limpia cualquier resto, lava el cemento, aplica un limpiador y después usa una abrillantadora para limpiar y alisar la superficie del cemento.

Step 5

Mezcla tu tinte de cemento en una cubeta de 5 galones (22,7 l). Vierte el concentrado de tinte en la cubeta y añade agua, alcohol o acetona para diluir el tinte y crear el tono que quieres.

Step 6

Aplica el tinte a tu cemento. Ponlo usando un aerógrafo, una brocha, una bomba rociadora o una esponja. Si quieres una sola aplicación suave de color, los rociadores van mejor; sin embargo, si vas a mezclar colores o trabajar en un diseño artístico, las esponjas, los aerógrafos y las brochas van mejor.

Step 7

Deja que el cemento seque durante al menos 24 horas. Aplica un sellador para proteger tu trabajo.