Desgraciadamente, en el mundo real algunas personas no parecen haber aprendido nunca las reglas básicas de la interacción humana adulta. Continuamente estas personas serán tus jefes, compañeros de trabajo o incluso tu familia, por eso es importante aprender a tratar con ellos.

Mantén la calma. El paso puede verse obvio, pero es extremadamente importante y mucho más fácil decir que hacer. Los adultos inmaduros ansían el conflicto y la atención ligada a ello. Tan tentador como pueda ser, si te permites caer a ese nivel, ellos habrán ganado. Además, permaneciendo calmado probablemente solo les animará a enfrentarte más al principio y posteriormente irán perdiendo interés y se moverán hacia otro objetivo.

Rehúsa seguir sus guiones. Los adultos inmaduros acostumbran hacer la vida más difícil para todos los que lo rodean y eventualmente la gente les aporta lo que ellos quieren. Recuerda que tienes el poder para rechazar el juego que están jugando. Discúlpate, retírate, niégate a comprometerte en sus argumentos o a aceptar sus actitudes. Aún cuando no puedas resistirte directamente, puedes negarte a seguir el juego. (Ver referencia 2).

Practica empatía. Los adultos inmaduros raramente tienen relaciones significativas en sus vidas porque están demasiado ocupados enfocándose en sus propias necesidades y creando conflicto a su alrededor. Muchas veces sus acciones vienen de lugares de inseguridad y dolor. Esto no disculpa lo que hacen y no significa que tu debas tratar de ser su amigo, pero será mucho más fácil si ya que estás cerca de ellos, intentas ver lo bueno o al menos lo simpático en ellos.

Niégate a invertir en la relación. Aún si el adulto inmaduro es una persona con la que tengas que estar, no necesitas perder más tiempo, energía o esfuerzo en él, más que lo que sea necesario. Si has practicado el paso tres y te sientes más simpático hacia él, esta persona seguirá intentando afectar tu vida y tu felicidad si los dos desarrollan una relación fuerte. Tales personas pueden cambiar pero toma tiempo y por lo general nunca lo hacen.