Liberación del individuo sobre el Estado

El liberalismo, un término que se utiliza a menudo en la fundación del país, se divorció de la relación entre el individuo y el Estado. Considerando que los conceptos prevalecientes de la época sostenían que un individuo era propiedad del Estado, los padres fundadores trataron de utilizar el liberalismo para dar a los individuos sus propios derechos que son independientes del Estado. Las personas ya no eran propiedad del estado, eran seres humanos que merecían sus propios derechos inalienables. Una de las grandes ventajas del liberalismo es que libera al individuo del Estado.

Promoción de las libertades

Debido a que el liberalismo defiende los derechos individuales, una gran ventaja es su garantía de determinadas libertades. La libertad de votar, opinar, publicar las críticas al gobierno, protestar y portar armas propias están asociadas con los derechos de un individuo. El principio del liberalismo es que las personas pueden hacer lo que quieran, siempre y cuando no perjudiquen a los demás ni afecten su libertad, y estos derechos son las ventajas de este sistema de creencias.

Asociaciones con el progreso

El término liberalismo es frecuentemente utilizado por ciertas partes que hacen hincapié en sus aspectos liberales. Por ejemplo, el Partido Demócrata en Estados Unidos a menudo se adjudica una ideología liberal. Los defensores del partido pueden usar el término para defender ciertos derechos individuales y también para connotar el progreso. El término liberalismo a menudo implica progreso porque busca reevaluar constantemente las presencias autoritarias del gobierno, siempre tratando de llevar el poder de nuevo a la persona. La ventaja del liberalismo es que tiene una visión a futuro, ya que promueve el cambio en lugar de estar atrapado en la tradición.

Respeta las minorías

Uno de los grandes aspectos del liberalismo es su capacidad de respetar a las minorías y las tradiciones de éstas. El liberalismo promueve la igualdad de derechos para todos, ya sean miembros del Ku Klux Klan, activistas de derechos de los homosexuales, musulmanes o estudiantes universitarios. Independientemente de la demografía o las creencias, el liberalismo sostiene que los individuos merecen practicar su propia creencia siempre que no limite la libertad del otro. Una gran cantidad de conceptos de democracia provienen de este concepto del liberalismo, en el que las personas se dan ciertos derechos a practicar sus puntos de vista.