Ejercicios prenatales con balón para ayudar al bebé a moverse hacia abajo

Mujer en una bola de ejercicios

Happy woman with silver ball (like pregnant) image by Lilia Barladyan from Fotolia.com

Las mujeres embarazadas y aquellas en trabajo de parto muchas veces descubren que un balón de yoga es indispensable durante el proceso. La posición que permite este balón ayuda a aliviar el dolor e incomodidad que se presentan en el último trimestre del embarazo y durante el parto. Además de servir como una medida para la comodidad de las madres en trabajo de parto, muchos ayudantes de parto, tales como asistentes, parteras y obstetras, afirman, debido a su eficacia, que funciona como una herramienta para asegurar el correcto posicionamiento del bebé en el canal de parto.

Sentada

Sentarse sobre la bola antes y durante el trabajo de parto puede ayudar a tu bebé a moverse hacia abajo y lograr una posición óptima durante el parto. Doulas Jennifer Reddy y Kelly Dietzen de Birth Angels, sugieren que las mujeres embarazadas se sienten en una posición vertical con la parte superior de su cuerpo lo más derecha posible. Intenta utilizar el balón, en lugar de una silla, como una cómoda alternativa durante el último trimestre. Mécete, balancéate o rebota suavemente en la pelota para expandir tu pelvis, dándole así espacio a tu bebé para que se mueva hacia abajo.

Durante el trabajo de parto, la partera Gail Tully de Spinning Babies aconseja a las mujeres en trabajo de parto, sentarse sobre la bola y mover sus cuerpos en círculos, para ayudar a empujar suavemente la cabeza del bebé hacia el cuello uterino. Realiza estos círculos en aumento cada 20 minutos acompañados de música animada, cambiando la dirección de los círculos periódicamente. Si las contracciones se producen entre tres y cuatro minutos de diferencia, alterna con ejercicios abdominales (juntando tus manos debajo de tu vientre y levantándolas hacia arriba) junto con los círculos.

Inclinaciones

Inclinarse sobre la bola en el trabajo de parto ayuda a aliviar la presión y te permite mecer tu pelvis de lado a lado, ayudando a calmar los dolores de parto y favorece al descenso del bebé. También le permite a los asistentes de parto un acceso fácil a tu espalda para masajear o para apretar en las caderas con ambas manos. De acuerdo con la asistente y profesora de trabajos de parto Penny Simkin, apretar en las caderas con ambas manos alivia el dolor cambiando la forma de tu pelvis y aliviando la tensión en tus articulaciones sacroilíacas. En casos de trabajos de parto posteriores (en los que la cabeza del bebé esta alojada en la parte trasera de tu pelvis) cambiar la forma de la pelvis ayuda a darle más lugar al bebé para descender. Para hacerlo, pon tus manos en los costados de las caderas de la mujer, justo al lado de la "parte carnosa" de sus muslos, y empuja hacia adentro hacia su centro pélvico durante la contracción entera.

Reclinarse en cama

Si terminas limitada a una cama durante el trabajo de parto, puedes también utilizar la bola para mejorar el parto y ayudar al descenso del bebé. La obstetra Diane Peterson recomienda posicionar a la mamá de forma que sus rodillas estén flexionadas y la planta de sus pies se toquen. Ubica la bola entre sus rodillas y pídele que se incline hacia adelante, abrace la bola y se meza de lado a lado. Baja los pies de la camilla de parto para hacer el ejercicio más fácil. Asegúrate de que dos asistentes de parto permanezcan de cada lado para evitar que ella se caiga de la cama durante los ejercicios. Peterson indica que estos ejercicios pueden corregir la posición de la cabeza del bebé si ésta está desalineada o ayuda a mejorar un parto posterior.

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