Step 1

Pinta las paredes de rosa si quieres crear una sensación de intimidad. El rosa contiene rojo, que denota fuego y pasión, y blanco, que es un elemento metal y representa el amor, el disfrute y el romance. El consultor de Feng Shui Ken Lauher dice que se considera el mejor color para un dormitorio.

Step 2

Utiliza tonos pastel suaves en lugar de colores oscuros o primarios. Los colores más suaves hacen que el ambiente se sienta más liviano. La sensación de liviandad será mejorada, en la mayoría de los casos, si el techo es blanco.

Step 3

Pinta las paredes de color celeste si quieres meditar y relajarte en tu dormitorio. El azul está considerado como el color etéreo, espiritual. El verde pálido es un color tranquilizante que también queda bien en un dormitorio porque crea una sensación de frescura y un sentido de esperanza. Evita utilizar demasiado rojo o naranja. Son colores apasionados que podrían mitigar contra una atmósfera de descanso.

Step 4

Limita la paleta de color a un color primario y un color secundario. Demasiados colores te pueden sobreestimular y crear una sensación de confusión.

Step 5

Elige colores para equilibrar tus estados de ánimo y apaciguar los rasgos de tu personalidad. Si eres una persona ardientes, los verdes y azules suaves pueden ser un contraste sosegado para tus estados psicológicos usuales. Si eres propenso a la pereza o indecisión, los naranjas o rojos vibrantes pueden inyectar algo de la pasión que necesitas.

Step 6

Armoniza los colores con decoraciones para ambiente, tu cubrecama y tu vista por las ventanas. Crea un ambiente en el que todos los colores creen un montaje que refleje tus aspiraciones a la vez que ofrece descanso y retiro relajante del mundo.