Step 1

Ponte los los guantes de trabajo y coloca el pato en una superficie dura. Agarra la primera ala lo más lejos del cuerpo como sea posible, sosteniéndola con firmeza. Corta el ala con tijeras tan cerca del cuerpo del pato como puedas. Repite la operación para la otra ala. Ahora corta las patas del pato tan cerca de la rodilla como sea posible.

Step 2

Agarra el pato con una mano y usa la otra mano para tirar de las plumas del pato en grupos pequeños. Las cantidades pequeñas de plumas deben ser fáciles de quitar, pero si intentas quitar demasiadas plumas a la vez el proceso puede ser más difícil. No es necesario quitar todas las plumas del pato, la parafina eliminará el resto. Asegúrate de quitar las plumas grandes de la cola.

Step 3

Llena un balde con agua fría y ponlo a un lado. Calienta suficiente agua en el otro cubo para sumergir el pato por completo. Agrega la parafina al agua caliente. El agua tiene que estar suficientemente caliente como para derretir la parafina por completo, pero no hacer que hierva.

Step 4

Retire el cubo de parafina de la estufa. Sujeta la cabeza del pato y sumerge al pato varias veces en la parafina hasta que esté completamente cubierto con cera. Coloca el pato en el balde de agua fría y deja que repose durante 10 a 15 minutos. La parafina se endurecerá en este momento. Retira el pato del agua fría y pela la parafina. Esto eliminará el resto de la plumas y plumones. Puedes poner la parafina endurecida directamente en el cubo de parafina derretida para usarla con otros patos.

Step 5

Corta la cabeza y la cola con el cuchillo y retira las entrañas. El pato ya está listo para el horno.