Identificación

Hay muchas especies de cochinillas que dañan las plantas y los árboles. Las cochinillas acorazadas secretan una capa blanca serosa que sirve como una casa para el insecto. Estas cochinillas son muy pequeñas, miden de 1/16 a 1/8 pulgadas (1,4 a 1,5 mm) de largo, y pueden ser de cualquier color, por lo general blancas o de color canela. Los piojos harinosos son otra especie de cochinilla y tienen un gran parecido a los copos de nieve. Están recubiertas por una capa blanca, de aspecto polvoroso, y por pelos blancos y sedosos.

Efectos

Tanto las cochinillas acorazadas como los piojos harinosos se alimentan sobre de las hojas, extrayendo su savia con sus piezas bucales penetrantes. Ambas especies suelen congregarse y alimentarse de las hojas bajas de las plantas, lo que las vuelve amarillas o les generan puntos. Las hojas que están muy apestadas se vuelven distorsionadas o retorcidas, y es posible que ocurra una defoliación prematura. Las cochinillas y los piojos harinosos excretan una sustancia dulce y pegajosa, conocida como melaza. Esta sustancia se adhiere a las hojas de las plantas y permite que se peguen los hongos de la fumagina. La fumagina no es especialmente dañina para las plantas, pero es antiestética.

Controles hortícolas

Las cochinillas y los piojos harinosos suelen controlarse con rociar la planta con un chorro fuerte de agua de una manguera o regadera. Repite este procedimiento dos veces a la semana para obtener mejores resultados. Otro método efectivo para eliminar estas plagas es lavar la planta con agua y jabón. Combina una cucharada de jabón líquido con 1/4 de galón (aproximadamente un litro) de agua y lava la planta. Repite esto una vez por semana hasta haber alcanzado el control deseado. Las plagas pequeñas pueden eliminarse con una bola de algodón embebida en alcohol. Extrae el insecto de la planta con la bola de algodón y deshazte de este.

Control químico

Los aceites hortícolas son efectivos como tratamiento para las cochinillas y los piojos harinosos. Estos productos funcionan recubriendo al insecto y sofocándolo. Aplica aceites hortícolas a fondo para obtener mejores resultados. Estos aceites también sirven para ayudar a aflojar a los hongos que causan la fumagina, y facilitan su lavado. También existen jabones insecticidas, disponibles en tu centro de jardinería local, que pueden eliminar las plagas. Como con los aceites hortícolas, aplícalos a fondo para obtener un buen control de los insectos.