Step 1

Aplica el compuesto para pulir o la pasta de joyero sobre una almohadilla de lana de cordero. También puedes pulir el rayón a mano, con movimientos circulares o usando una pulidora eléctrica a velocidad media.

Step 2

Quita el compuesto para pulir, la pasta de joyero o la pasta blanqueadora del vidrio de vez en cuando, para ver el progreso en la eliminación de la marca.

Step 3

Mezcla dos onzas de amoniaco (60 ml) con dos cuartos de galón (1,8 l) de agua. Debes asegurarte de tapar la nariz durante este proceso. También debes usar guantes de goma y gafas de seguridad siempre que trabajes con este producto.

Step 4

Limpia la superficie del vidrio con el agua y el amoniaco, usando una esponja suave y limpia.

Step 5

Seca el vidrio con una toalla que no deje pelusas. Si los rayones no han desaparecido por completo, al menos deberían ser menos notorios. Si no ves una diferencia significativa, considera contratar una empresa que reemplace o vuelva a pulir el vidrio.