Step 1

Asegúrate de que la prenda sea lavable. El Paso 6 da indicaciones para telas no lavables. Intenta quitar la mancha lo antes posible.

Step 2

Prepara una mezcla con agua caliente, media cucharadita de detergente para platos y una cucharada sopera de amoniaco en un área bien ventilada. Coloca la preparación sobre la mancha durante 30 minutos. Enjuaga bien. Si la mancha continúa, sigue las indicaciones del Paso 3.

Step 3

Combina un recipiente de agua caliente con una cucharada sopera de aceite blanco. Vierte la preparación en la mancha durante una hora. Si este paso es posible que no funcione con algodones o lino. Enjuaga la prenda bien y déjala que se seque. Si la mancha persiste, muévete al Paso 4.

Step 4

Aplica algodón de 90º a la mancha, es posible que necesites diluirlo. Prueba en un lugar discreto primero. Cuando la mancha comience a desaparecer, seca el líquido y la mancha con una almohadilla limpia y absorbente. Enjuaga bien y déjala secar. Si la mancha persiste, continúa con las indicaciones del Paso 5.

Step 5

Mezcla un blanqueador, ya sea con o sin cloro, dependiendo de la tela, según las indicaciones del paquete. Permite que la tela absorba la mezcla blanqueadora. Enjuaga la prenda y déjala secar al aire libre.

Step 6

Moja la tela no lavable con agua. Utiliza un gotero para aplicar la mezcla de 1 recipiente con agua caliente con una cucharadita de detergente para platos y una cucharada de amoniaco en la mancha. Deja que la prenda descanse 30 minutos. Utiliza el gotero para quitar la mancha.

Step 7

Repite el Paso 4 si la mancha persiste. Al terminar, limpia la mancha con agua usando un gotero.