Invitaciones

Step 1

Acepta la invitación con gracia. Incluso si no te gusta la persona, o si sabes que no serás capaz de asistir al evento, al menos debes de hacer que la persona que te invitó sienta que aprecias su consideración. Sonríe cuando te dé la invitación y trata de lucir genuinamente feliz. Decir algo lindo a la persona para expresar tu gratitud también es una buena idea. Asegúrate de no darle ninguna señal mezclada como un tono extraño o una postura de indignación.

Step 2

Dile que tal vez pueda ir, pero no estás seguro. Incluso si no es toda la verdad, no quieres que piense que estás eligiendo a propósito no asistir diciendo inmediatamente que no puedes. Para evitar crear mucha expectativa, dile que te encantaría ir, pero que no estás seguro de si podrás hacerlo.

Step 3

Confirma tu presencia dentro del marco de tiempo provisto en la invitación. Es muy rudo de tu parte retrasarte para contestar hasta el último minuto. Intenta regresarla tan pronto como sea posible para asegurarte de que ha sido considerado con ella en términos de planificación del evento.

Step 4

Dile que tal vez los dos podrían juntarse en otra ocasión. Este paso no es completamente necesario si definitivamente no te cae bien la persona que te invitó, porque sería comprometer tu integridad, aunque es regularmente una buena técnica para asegurarte que la persona no lo tome como ofensa. Esto reduce los sentimientos heridos debido a que muestra que estás arrepentido de perderte la oportunidad de pasar tiempo con ella.

Step 5

Pregúntale cómo estuvo el evento la próxima vez que veas a la persona, si es conveniente. Este es un lindo gesto que será apreciado mientras seas capaz de mostrar interés y hacerlo sinceramente. Una vez más, este paso no es completamente necesario, pero es una forma genial de terminar cómo rechazar amablemente una invitación.