La queratosis seborreica es un crecimiento benigno de la piel causada por el crecimiento anormal de las células de la piel, normalmente en la base de un lunar. Por lo general, se confunde con verrugas en la piel y se asocia normalmente con el envejecimiento de la piel. Las protuberancias varían en tamaño, forma y color. Aparece como una protuberancia individual o en grupos, y suelen ser gruesas y abultadas. Aunque pueden parecer inofensivas, son feas, por lo que deben retirarse de la piel. Afortunadamente, se pueden quitar con el uso de remedios caseros.

Peróxido de hidrógeno

Para tratar la queratosis seborreica, se utiliza el peróxido de hidrógeno con una concentración de 23% a 80% para ayudar a reducir la aparición de estas manchas. El peróxido de hidrógeno debe aplicarse directamente en los lunares, los cuales se blanquearán y permanecerán así durante unos minutos. Después de la aplicación, poco a poco se vuelven rosados y luego aparecen costras encima.

El peróxido de hidrógeno deben aplicarse periódicamente en las zonas afectadas hasta que desaparezcan. Usa un cepillo pequeño o un hisopo de algodón para aplicar el peróxido de hidrógeno de forma más precisa. La piel alrededor del área a ser tratada también debe tratarse con una crema o loción hidratante antes de la aplicación para que no se queme con el peróxido de hidrógeno. El tratamiento puede hacerse a intervalos de una semana, si es necesario. Para prevenir el crecimiento recurrente de la queratosis seborreica, también se puede añadir al agua de baño el peróxido de hidrógeno.

Solución de ácido glicólico

La solución de ácido glicólico se prepara virtiendo ácido glicólico de 30% en una botella con rociador. La solución se rocía sobre la zona afectada diariamente. Deja que la solución permanezca en la piel durante varias horas. Evita lavar el área con la solución aplicada. Aunque este tratamiento puede causar una pequeña sensación de ardor, estarás perfectamente bien. Después de la aplicación, la piel comienza a ponerse de color rojo, y se forma una corteza en los puntos tratados. Los puntos no se verán bien por algún tiempo, pero la corteza finalmente se caerá para revelar una piel suave. Para obtener mejores resultados, la solución se puede dejar en la piel durante la noche. Para manchas difíciles, vuelve a aplicar la solución de glicólico después de que hayan sanado lo suficiente los puntos desde la primera aplicación. Los tratamientos de mantenimiento también puede que sean necesarios si vuelven a aparecer en la piel las protuberancias de queratosis seborreica.

Si es la primera vez que utilizas una solución de ácido glicólico, comienza en las áreas afectadas de la espalda, comenzando con una pequeña sección. Nunca la apliques en todas las partes afectadas del cuerpo al mismo tiempo. Al aplicarla en sólo una pequeña sección primero, podrás ver cómo tu piel reacciona a la solución de ácido glicólico. Si la picazón se vuelve insoportable (o no sientes otra cosa que el esperado suave pinchazo) entonces lo mejor es que la dejes de utilizar.