Problemas con una esposa emocionalmente inmadura

Estar casado con una mujer emocionalmente inmadura es estresante en una relación.

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Si estás casado con una mujer emocionalmente inmadura, lo más probable es que esté afectando tu relación. Probablemente te estés enfrentando problemas que van desde la intimidad a la planificación de tus futuras responsabilidades. Una persona emocionalmente inmadura no es capaz de expresar sus emociones apropiadamente y es a menudo autodestructiva. Los síntomas incluyen baja autoestima, evitar conversaciones y llegar constantemente tarde a eventos y reuniones. La inmadurez emocional puede tener sus raíces en experiencias de la infancia o en la forma en que tu esposa fue tratada, sobre todo, en su juventud.

Falta de espacio

Una esposa que es emocionalmente inmadura tiene una baja autoestima y problemas con el fomento de la confianza. Actúa necesitada, celosa y demasiado dependiente de ti. A menudo se sitúa físicamente en tu campo visual por miedo a ser olvidada si no está constantemente haciéndose presente. Como su marido, es probable sientas que no tienes ninguna independencia o libertad, y que sin duda no tendrás tiempo libre o espacio para pasar tiempo con amigos, participar en pasatiempos o incluso relajarte. Sentirás que sólo tienes tiempo para prestarle atención a tu esposa, ser cariñoso y satisfacer su ego.

Falta de comunicación

Evitar conversaciones importantes callando y sin hablar o simplemente no estar cerca cuando llegue el momento de hablar son signos de inmadurez emocional. Como adulto, quieres una esposa que se comunique contigo abierta y honestamente. En una conversación con una mujer emocionalmente inmadura, sentirás cómo tus preocupaciones y opiniones no son escuchadas ni respetadas. Si tu esposa está retrocediendo o retirándose, ni siquiera serás capaz de iniciar una conversación necesaria. Nunca serás capaz de llegar al fondo de los problemas en tu matrimonio o de tus planes para el futuro.

Retraso constante

Tener una esposa emocionalmente inmadura también tiene un efecto dominó en tu vida fuera de tu matrimonio. Al llegar constantemente tarde al trabajo, a reuniones y eventos es un signo de inmadurez emocional. A veces, esto se debe a la falta de sueño y a dormir en exceso, lo que se convierte en un problema de salud para tu esposa. También puede ser simplemente que ella no puede organizar bien su tiempo. Llegar tarde al trabajo o faltar a los encuentros impactará negativamente en su trabajo y causará problemas financieros en tu matrimonio. Llegar tarde a los grandes eventos, como bodas o fiestas, crea una brecha entre tú y tu familia o amigos.

Evasión de responsabilidades

Tu esposa emocionalmente inmadura puede tener un momento difícil para mantener un horario o un presupuesto. Esto afecta negativamente a la forma en que tu casa funciona, ya que tu esposa no va a ser capaz de coordinar su horario de trabajo con las comidas, el cuidado de la mascota familiar o con llevar a los niños a la práctica de deportes. También puede no ser capaz de mantener sus gastos dentro del presupuesto. Abandonando sus responsabilidades pone tensión en el matrimonio y te hace sentir que tienes ocuparte de todo para que quede todo hecho.

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