Tipos

El sarcoma es un grupo de tumores que generalmente se originan en los tejidos de conexión. La mayoría de estos cánceres en los perros son malignos. Se llaman así por las células, el tejido y la estructura que involucran, como el angiosarcoma, condrosarcoma, fibrosarcoma, liposarcoma y osteosarcoma. El fibrosarcoma se origina como fibrocitos o tejidos de conexión. El neuro-fibrosarcoma se origina en el tejido de conexión alrededor de los nervios y un sarcoma anaplástico está formado por células malignas cancerosas.

Consideraciones

El promedio anual de sarcomas en perros es de entre 35 en 100.000. Desgraciadamente, la causa del sarcoma todavía no ha sido identificada. Sin embargo, se ha establecido una asociación con la radiación, el trauma, los parásitos y las razas de perros grandes.

Identificación

Los sarcomas de los tejidos blandos tienden a tener características comunes importantes en su perfil biológico. Suelen aparecer como seudo-encapsulados, contenidos por una capa protectora o membrana, tumores carnosos pero que tienen una pobre definición de la estructura microscópica del tejido o que se infiltra a través de las zonas de la cara. Estos crecimientos cancerosos pueden pasar desapercibidos y parecer un acné o pueden ser bultos de tamaños alarmantes. Los sarcomas pueden ocurrir u originarse en cualquier parte del cuerpo del perro.

Prevensión/Solución

Hay tres métodos básicos para el tratamiento de un sarcoma en los perros. Uno es un gerenciamiento médico que involucra medicaciones específicas y drogas para retardar o detener el crecimiento del tumor o para atacar más agresivamente a las células cancerosas con el objeto de erradicarlas.

Otro método es la cirugía, con la que se intenta remover el tumor por completo. Aunque es un procedimiento invasivo, no siempre es una cura si no se remueven todas las células cancerosas y puede terminar resultando una solución temporaria. A veces, aunque ya se sepa antes de que empiece la cirugía que el tumor no se puede remover por completo, se la lleva a cabo para mitigar el crecimiento y los síntomas producidos por el cáncer. A ambos procedimientos quirúrgicos se les debe hacer un seguimiento o puede ser que debas fijar una agenda de mantenimiento de las células cancerosas para inhibir el crecimiento de nuevos sarcomas.

El tercer tratamiento de los sarcomas es la terapia de radiación, generalmente hecha por un veterinario especialista en radiología.

Los sarcomas pueden comportarse de forma diferente, de acuerdo a la biología específica y única del perro y la conformación de las células, por lo tanto, cada caso debe ser evaluado individualmente. Aunque los tres tratamientos se pueden usar en un perro, nuevamente depende de la salud del animal y si está o no lo suficientemente sano como para soportar los procedimientos

Punto de vista de un experto

Si consideras la cirugía para tu perro, hay algunas cosas que pueden aliviar su sufrimiento. Primero, casi todos los perros no ingerián su alimento habitual luego de la cirugía. Si este es el caso de tu canino, dale comida casera que tenga partes iguales de proteínas y carbohidratos como un plato de carne cocida y pasta. Si piensas que está dolorido durante el pos-operatorio, considera darle una medicación para los dolores como Tylenol con codeína o anti-inflamatorios como Rimadyl o Elogesic.