¿Puedes pintar un plato de ducha?

No es necesario reemplazar el plato de una ducha para tener uno nuevo. Los productos innovadores de las mejores del hogar hacen posible pintarlo, ya sea que esté hecho de fibra de vidrio, de acrílico, de azulejos cerámicos o de laminado. Pintar un plato de ducha es económico y moderadamente fácil de hacer para la mayoría. Es posible adquirir todos los productos necesarios para el trabajo de forma separada, pero será más sencillo y económico comprar un kit.

Preparación y pintura

Para pintar un plato de ducha, primero debes limpiarla y prepararla adecuadamente.

Muchos kits traen los limpiadores, la lija y los agentes de imprimación. En la mayoría de los casos, la masilla y la lechada vieja deben removerse. Las puertas de la ducha o las cortinas deben retirarse, y todo el herraje, las juntas y los marcos de metal deberían cubrirse con cinta de enmascarar. Las rajaduras o rayones en la superficie del plato de ducha deben ser reparados antes de pintarlos.

Algunos tipos de pintura están hechos para aplicarse con rodillo o con brocha, y otros deben rociarse. Sigue las instrucciones del fabricante para aplicar la pintura.

Consideraciones de seguridad

Algunos productos pueden ser peligrosos para la gente con asma o con problemas respiratorios. Procura que haya una buena ventilación cuando trabajes con productos de este tipo. Cierra todas las fuentes de fuego y no fumes. Siempre usa guantes de látex, mascarilla y lentes protectores al manipular estos productos.

Cuidado de tu plato de ducha pintado

Evita usar limpiadores abrasivos, lejía, quitamanchas o esponjas rugosas en tu plato de ducha pintado. Las alfombrillas de seguridad con ventosas podrían dañar el acabado.

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