Cómo tratar a caballos con inflamación en el corvejón

Escrito por JoAnn Joubert ; July 18, 2017
horse legs image by Vita Vanaga from Fotolia.com

La mayoría de los casos de corvejones inflamados es porque un caballo ha estado "alejado", una condición benigna por falta de ejercicio. También conocida como congestión estática, es el resultado de que la sangre y los ganglios linfáticos se abultan en los corvejones causando inflamación. No es algo doloroso para el caballo y, generalmente desaparece con el movimiento y la actividad. Diagnosticar el problema es fácil aunque los tratamientos y la prevención cuestan un poco de trabajo y pueden ayudar a controlar el problema, el cual por lo general se presentará a lo largo de la vida del caballo.

Diagnóstico

Pon tu mano en el corvejón inflamado para asegurarte que sólo se trata de la inflamación y que no se sienta caliente. El calor en el corvejón significa lesión.

Pregunta sobre el historial del caballo. ¿Se ha ejercitado últimamente? ¿Ha pasado casi todo el tiempo en la caseta sin moverse? ¿Lo montaron y después lo dejaron en la caseta dos o tres días? Si las respuestas a estas preguntas son afirmativas, es más probable que la inflamación se deba a que estuvo detenido.

Haz una prueba de cojera. Deja que alguien vea las patas del caballo mientras te alejas y luego lo diriges al observador, primero caminando y luego trotando. Si cojea o si su movimiento es de dolor entonces necesitas contactar a un veterinario. Si el caballo sólo muestra una rigidez suave y no parece sentir dolor entonces se debe a que ha estado parado.

Pide a tu veterinario que realice pruebas como radiografías, exámenes de cojera, análisis de sangre o incluso una biopsia para descartar otras posibles enfermedades. Si el caballo no cojea y la biopsia y el análisis de sangre salen bien, es más probable que la condición sea una congestión estática.

Observa la inflamación durante una semana. Si persiste por más de cinco días puede sufrir una infección secundaria en la piel. Estas condiciones se generan porque la piel está alojando bacterias, lo que lleva a infecciones. También, si la inflamación no disminuye en una semana aún con el tratamiento, notifica a tu veterinario.

Tratamiento

Usa una manguera de jardín para aplicar agua fría en el área de 20 a 30 minutos. El agua fría en el corvejón aumenta la circulación en el área y puede reducir la inflamación.

Saca a tu caballo de su caseta o cercado para animarlo a que haga ejercicio suave. Esto podría ser en la forma de una asistencia en un potrero cerrado o campo, embestida, ejercicio corto, fácil tal como ser montado. La inflamación debería disminuir en 30 minutos hasta una hora en caballos más jóvenes aunque puede tardar algunas horas en caballos más viejos.

Frota un astringente como alcohol frotador o con hamamelis, sobre los corvejones después del ejercicio para aumentar la circulación.

Aplica una cataplasma medicada hecha con mentol y sales de Epsom para aumentar la circulación y sacar los fluidos de la piel.

Pon los vendajes de traslado en las patas traseras para brindar soporte al corvejón y aplica presión para minimizar la recolección de fluido en el mismo. No dejes estos vendajes por más de 12 horas a la vez.

Prevención

Mantén un horario de ejercicio regular para tu caballo. Este problema seguirá durante su vida, por lo tanto, es importante seguir los pasos hacia la prevención e incluso también es benéfico hacer ejercicio leve.

Aumenta el tiempo de participación en el campo o en la pradera. Simplemente tener tiempo fuera del establo para la libre circulación disminuirá la posibilidad de acopio. Cuanto más a menudo circules a tu caballo, mejor.

Frota astringentes como alcohol frotador o con hamamelis en la pata de tu caballo después de cada paseo o sesión de ejercicio. Estos astringentes aumentan la circulación y disminuyen las oportunidades de que los corvejones se inflamen debido a la congestión estática.

Pon los vendajes de traslado en las patas traseras de tu caballo durante intervalos de 12 horas para evitar que se apoye y haga presión. El horario adecuado es dejar las vendas durante 12 horas y después quitarlas durante otras 12 horas.

Medica a tu caballo con acepromacina, corticosteroides o diuréticos para evitar y controlar la inflamación. Éstos necesitarán estar prescritos por el veterinario y comprarlos a través de él.

No uses cataplasmas a base de barro, en especial si existen heridas frescas abiertas en los corvejones ya que este tipo de cataplasta aumenta las posibilidades de infección. Si parece que tu caballo se lame o si tiene calor en el corvejón notifica de forma inmediata a tu veterinario ya que estos son signos de lesión y podría ser grave.

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