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Limpia tu guante de béisbol con acondicionador para cuero. No solamente hará que tu guante se vea mejor, también suavizará el cuero, haciendo fácil trabajarlo.

Frota un poco de acondicionador para cuero en los nuevos cordones para suavizarlos.

Examina los patrones de las costuras en tu guante y memorízalas. Diferentes tipos de guantes tienen pequeñas diferencias en los patrones de costura, por lo que inspeccionar tu guante es la mejor manera para asegurarte de que conoces los patrones apropiados para acordonarlo.

Quita una sección del cordón de tu guante de béisbol. Tal vez necesites cortar las costuras con tijeras. Las pinzas de punta fina serán útiles si estás quitando los cordones de un guante viejo y estos están duros. Dedica atención al camino que el cordón sigue a medida que lo vayas sacando del guante.

Ata un nudo por arriba en una de las puntas del cordón de reposición. Aprieta bien el nudo antes de seguir adelante.

Corta y achica el lado opuesto del cordón que reemplazarás, para que entre bien en la aguja. Deja suficiente cantidad del cordón para coser la sección completa del guante en la que estás trabajando.

Mete el hilo a través de los agujeros vacíos exactamente como el cordón viejo estaba cosido. Si bien una aguja para cordón te ayudará a hacerlo de manera simple y prolija, puedes coser el nuevo cordón con los dedos y unas pinzas de punta fina.

Tira del cordón hasta que quede apretado una vez que esté completamente cosido. Prueba qué tan apretada está la costura usando el guante.

Ata un nudo cómodo en el extremo suelto del cordón de reemplazo. Ata este nudo tan cerca del guante como te sea posible.

Repite este proceso para cualquier otro cordón que necesite ser reparado.