Preparación de la cama de siembra

El mejor momento para sembrar el césped varía con los climas. Consulta a un servicio local de extensión agrícola para determinar la mejor época de siembra para tu zona. Trabaja el suelo a una profundidad de 6 a 8 pulgadas (15 a 20 cm) y retira las rocas, madera u otros residuos presentes. Aplica un herbicida no selectivo varias semanas antes de la siembra para evitar el crecimiento de malezas, según aconseja Erv Evans, horticultor de la Universidad del Estado de Carolina del Norte. Si el suelo está compactado, agrega una capa de 2 a 3 pulgadas (5 a 7,5 cm) de mantillo u otra materia orgánica, como compostaje o estiércol, para mejorar la aireación.

Siembra

Elige la semilla adecuada para tu zona y para el tipo de uso. Algunos tipos de césped requieren condiciones de pleno sol para crecer adecuadamente. Otras son más propicias para lugares sombreados. Usa una esparcidora para distribuir las semillas en forma pareja. Pasar dos veces por el mismo lugar en direcciones diferentes ayudará a que la siembra sea más pareja, según el sitio web sobre césped de la Universidad del Estado de Ohio. Cubre las semillas con una capa ligera de suelo, usando un rastrillo.

Después de la siembra

Un rolo es una herramienta que se usa para presionar las semillas contra el suelo y que tengan buen contacto con la tierra para poder enraizar y absorber el agua y los nutrientes necesarios para crecer. Estos pueden encontrarse en cualquier tienda de suministros para jardinería. Riega la zona a una profundidad de ½ pulgada (1,2 cm). Aplica un fertilizante que tenga una relación 1-1-1 de nitrógeno-fósforo-potasio para brindarle nutrientes a las plántulas.

Riego adecuado

Las plántulas que están naciendo pueden morir rápidamente si no se las mantiene humedecidas. Usa rociadores para mojar la superficie cuatro veces al día, comenzando a las 7 a.m. y terminando a las 6 p.m., según Joe Provey, del sitio web Popular Mechanics. El área sembrada debe mantenerse húmeda pero no mojada. Satura la zona a una profundidad de 1 a 2 pulgadas (2,5 a 5 cm). El riego excesivo es tan malo como la falta de riego. No dejes que la cama de siembra se seque en ningún momento. Las semillas tardarán entre 7 y 14 días en germinar. Cuando estas brotan, riego con menos frecuencia pero más profundidad. Una capa de mantillo de paja esparcida sobre la cama de siembra ayudará a retener la humedad y evitará la erosión de la capa superior de suelo. Riega el césped regularmente durante el primer año para ayudar al establecimiento de raíces.