Step 1

Pule el MDF suavemente con un papel de lija (120 o 150). Esto quitará la suciedad y proporcionará una mejor adherencia cuando coloques la imprimación.

Step 2

Sella los bordes con un compuesto de yeso. Los bordes de MDF son "abiertos" y más porosos que las superficies, así que si no están sellados, pueden absorber la humedad, provocando que el material se combe y se quiebre. Esparce el compuesto en forma regular en los bordes con tus dedos. Deja que el material se seque.

Step 3

Pule el compuesto de yeso en los bordes con un papel de lija. No quites todo el material, sólo alísalo.

Step 4

Limpia el área con un paño antiestático. Éste es ligeramente pegajoso y levantará toda aquella suciedad o polvo que haya quedado en el material.

Step 5

Aplica la imprimación a base de solvente (óleo- alcohol- o base de laca) sobre el material en forma regular con un pincel. Es importante usar base de solvente y no base de agua porque la fibra MDF absorberá toda la imprimación de la base de agua y aumentará el veteado del material. Esto resultará en un trabajo de pintura lleno de grumos. Deja que se seque durante 24 horas.

Step 6

Aplica una capa de pintura con un pincel. Usa cualquier tipo de pintura (látex, óleo o laca) porque el MDF deberá sellarse y no lo absorberá. Pinta de manera uniforme y permite que se seque completamente. Coloca una capa más de pintura para finalizar.