Step 1

Elige el tipo de incienso con el que deseas trabajar. Generalmente, se puede comprar en forma de conos, de varillas y en grumos sueltos, aunque esta presentación es menos común. Para este artículo, sólo deberás considerar la presentación en cono y en varillas.El incienso viene en una variedad de fragancias distintas. Algunas de ellas se pueden utilizar para evocar una sensación de rejuvenecimiento o de calma. Todos agregan cierto toque romántico a tu espacio.

Step 2

Usa incienso en conos. Elige un quemador adecuado si compras conos, asegurándote de que está fabricado en un material que es capaz de absorber el calor conforme el incienso se quema por completo. Muchos quemadores tienen tapas, las cuales puedes utilizar si quieres, aunque esto realmente no es necesario.

Step 3

Usa incienso en varillas. Esta es probablemente la presentación más popular, por lo que podrás encontrarla en muchos lugares que van desde tiendas de abarrotes hasta almacenes especializados. El quemador más común para incienso en varillas es una especie de bandeja de madera en forma de canoa. Hay un pequeño orificio en un extremo de donde es posible sujetar la varilla. Las cenizas se recogen al caer dentro de la bandeja. El incienso en varillas también se puede quemar dentro de un recipiente resistente al calor. Basta con que pongas algún otro objeto o material en el interior para que sujete la pieza en posición vertical. Prueba con un poco de arena.

Step 4

Enciende el incienso. Ya sea en forma de varilla o cono, enciende el incienso de manera que mantenga brevemente una pequeña llama. Luego sopla la llama y apágala. Ahora el incienso comenzará a quemarse, emitiendo su aroma. Así de fácil.

Step 5

Saca el incienso del recipiente o quemador cuando lo creas necesario. Para apagar una pieza de incienso e impedir que siga gastándose, simplemente hunde la varilla en la arena. Del mismo modo, si estás usando un cono, todo lo que debes hacer es darle la vuelta con cuidado y ponerlo en un pequeño recipiente con arena.