Mortero y mano de mortero

Un boticario normalmente hacia sus propias medicinas y tratamientos. Esto lo hacían al moler hierbas, plantas y otras sustancias utilizando el mortero. Éste quizá preparaba sus remedios en su tienda, pero algunos quizá requerían preparación fresca. El mortero y la mano de mortero eran tan reconocidos en el negocio que algunos boticarios marcaban sus tiendas con señales con la imagen de estas herramientas.

Instrumentos quirúrgicos

Los boticarios trataron lesiones como huesos rotos. También ayudaron con los partos por lo que tenían fórceps y cuchillos quirúrgicos para el procedimiento. Otra herramienta quirúrgica común era la lanceta, un cuchillo pequeño utilizado para cortar abscesos o extraer sangre. La flebotomía se originó en la antigua Grecia y Egipto para tratar fiebres, dolores de cabeza y otras enfermedades inexplicables. En los tiempos coloniales, el procedimiento tenía una antigüedad de casi 2.500 años. Como alternativa de colocar una lanceta en la vena de un paciente enfermo, los boticarios utilizaban sanguijuelas para drenar la sangre.

Instrumentos dentales

Las personas de la colonia limpiaban sus dientes con gárgaras, raspadores o raíces en forma de cepillos. Las caries y otros problemas orales, comúnmente los enfermaban. Un boticario o su aprendiz realizaban varias extracciones de dientes con herramientas especiales. Éstas eran: extractor de diente el cual lucía como llave de puertas coloniales para extraer los molares inferiores, elevador de pata de cabra para levantar un diente desde el hueso y pelícanos nombrados así ya que esta herramienta que utilizaba apalancamiento para aflojar dientes infectados, se asemejaba al ave. Desafortunadamente, para los pacientes de la colonia, la anestesia no se utilizó para la extracción hasta mediados de 1.800.

Manuales médicos y libros de texto

Los boticarios aprendían su negocio al trabajar por varios años como aprendices y observando en hospitales, asistiendo a clases y consultando manuales y libros de texto médicos. Varios de estos libros que datan de la época colonial todavía sobreviven en la Librería Nacional de Medicina. Los boticarios llevaban manuales para consultar los tratamientos para las enfermedades, procedimientos quirúrgicos, teorías médicas y el uso de ciertas medicinas y recetas medicinales.