Cómo vivir con un perro que tiene problemas neurológicos

Muchas enfermedades neurológicas no pueden curarse, pero se pueden manejar los dolores y síntomas.

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Puede resultar muy desconcertante descubrir que tu perro tiene un daño neurológico prolongado o ha contraído una enfermedad neurológica. Existen muchas variantes de dolencias neurológicas en perros. Si bien muchas son tratables, los tratamientos varían según el diagnóstico y gravedad de los síntomas. Elegir un papel proactivo en el plan de tratamiento de tu perro le proveerá a tu perro la mejor oportunidad para una vida cómoda y placentera.

Cuidado del veterinario

Consulta a tu veterinario sobre la salud de tu perro, incluyendo los síntomas o cambios nuevos en tu perro. El veterinario puede recomendar medicamentos según la dolencia neurológica o la gravedad de los síntomas. Los antiinflamatorios o esteroides pueden aliviar el dolor y la pérdida muscular. La cirugía puede ser una opción para algunas enfermedades neurológicas. Mantén a tu veterinario informado sobre el progreso del perro para asegurar que los medicamentos y tratamientos tradicionales son efectivos.

Terapia alternativa

Las terapias alternativas como hierbas, trabajos quiroprácticos y acupuntura pueden aliviar síntomas que incluyan el dolor y puede mejorar la memoria muscular. Ginkgo biloba puede aumentar el flujo sanguíneo al cerebro, mientras que la echinacea puede estimular el sistema inmune y mantener al margen las infecciones adicionales. Consulta a un veterinario que se especialice en terapias alternativas para descubrir si estos tratamientos son una opción viable para la dolencia neurológica específica de tu perro.

Ejercicio

El ejercicio regular puede mantener bajo control los síntomas neurológicos de tu perro y mejorar sus habilidades motoras. Camina diariamente con tu perro. Si parece que tu perro tiene dolores o dificultades, comienza con una sesión corta y lenta y lentamente avanza hasta realizar caminatas más largas. La terapia con agua es una opción de bajo impacto pero altamente efectiva. Tu perro puede caminar en una piscina poco profunda o caminar en una cinta para correr bajo el agua para aumentar la movilidad, especialmente si tiene dificultades debido al peso o dolor.

Manejo en casa

Crea un espacio cómodo en donde pueda vivir tu perro. Coloca su comida en un espacio al cual pueda acceder fácilmente. Si es alto, coloca su comida y tazón con agua en una caja para que no tenga que luchar para alcanzarla. Compra un cabestrillo para envolver la barriga del perro y ayudarlo a subir las escaleras o a caminar sobre un suelo resbaladizo. Si dejas subir al perro a los muebles, considera instalar una rampa o escalera pequeña para que pueda subirse a la cama o sillón.

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