Step 1

Si el perro que está orinando las plantas es tuyo, coloca una barrera que lo encierre en una zona del jardín. Colócalo dentro de esta zona cada vez que salga para evitar que orine donde quiera.

Step 2

Riega al perro con una manguera cuando veas que empieza a orinar en un lugar indeseado. Esto funciona para tu propio perro y para cualquiera del vecindario. Un pulverizador de agua también ayuda a diluir cualquier orina que haya logrado llegar a las plantas. La mayoría de los perros escapan cuando reciben un chorro de agua en la cara.

Step 3

Coloca plantas detrás de la barrera o de la cerca. Asegúrate de colocarlas lo suficientemente lejos para que el perro que levante su pata sobre la barrera no pueda orinar sobre la planta. Esto funciona si hay una acera y una valla por donde suelen pasar los perros del vecindario. Estos perros orinarán en la valla mientras caminan, pero serán incapaces de llegar a las plantas.

Puedes cercar las huertas para mantener alejados a los perros no deseados. Planta todas las verduras hacia la parte de atrás de la línea de la valla para evitar que un perro orine encima. Una alambrada sencilla es barata y funciona bien como material para cercar con unos pocos postes.

Step 4

Si tienes una perra, planta los vegetales y las plantas valiosas en un parterre elevado. Las perras se agachan para orinar y muy pocas veces se subirán a uno; en su lugar, escogerán orinar en un terreno llano. Los jardines en contenedores también son efectivos para este propósito.

Step 5

Enséñale a tu perro a orinar y a defecar en una zona específica del jardín. Saca al perro con una correa para que no tenga vía libre en el jardín. Cuando hayas establecido una rutina, la mayoría de los perros continuarán utilizando el mismo lugar para hacer sus necesidades. Si el perro es macho y no está castrado, tendrás que hacer esto para evitar las marcas territoriales alrededor del jardín.

Step 6

Coloca mantillo de cono de pino alrededor de los árboles, arbustos y plantas recién plantadas para evitar que el perro entre en el parterre para hacer sus necesidades. A la mayoría de los perros no les gusta la sensación de los conos debajo de sus patas.

Step 7

Mezcla cuatro chiles jalapeños en una licuadora con dos tazas de agua y vierte la solución en una botella pulverizadora. Riega las plantas sobre las que el perro siempre orina, ya que los perros son sensibles al olor de los chiles y evitarán la zona. Si llueve, tendrás que volver a rociar el área. La solución no dañará las plantas.