Densidad

La densidad de los colchones de espuma es equivalente a las libras que pesan por cada pie cúbico. Las densidades van desde bajas, 3 libras (1,3 kg) o menos, a altas, 5 libras (2,2 kg) o más. Los colchones con mayores densidades pueden durar más tiempo, pero se sentirán mucho más firmes y duros. La espuma de baja densidad se descompone mucho más rápidamente y pierde la sensación de comodidad por la que son conocidos los colchones de espuma. Busca una densidad de espuma de 4 libras (1,8 kg) para tener una combinación de confort y durabilidad.

Olor

Uno de los inconvenientes más comunes de un colchón de espuma es un olor como de químico o de gas durante las primeras semanas después de traer a casa el colchón nuevo, lo cual se sabe que no es perjudicial, pero por lo general es una molestia para el pequeño porcentaje de las personas que lo notan. Aún menos personas tienen una reacción física al olor como dolores de cabeza, náuseas, irritación de ojos y garganta, insomnio, sudoración y asma. Los olores son más comunes entre los colchones de espuma viscoelástica que entre los de látex o de espuma de poliéster.

Temperatura

Los colchones de espuma viscoelástica son sensibles a las temperaturas frías y calientes. El aire frío hará que el colchón sea más firme, pero si el aire es muy caliente o cuando se calienta por el calor corporal, será más suave y puede a veces hace que rodar o levantarse sea más difícil. La espuma viscoelástica también puede hacer "dormir caliente", absorbiendo el calor del cuerpo y no dispersándolo en el aire. Los que tienden a sentirse calientes y sudorosos por la noche a menudo no prefieren colchones de espuma viscoelástica por esta razón.

Período de ajuste

Los colchones de espuma viscoelástica, de látex y de poliéster se sienten diferentes de los demás colchones y lleva tiempo acostumbrarse. Algunas personas incluso descubren que no son cómodos al principio, especialmente en los colchones de mayor densidad. Luego de un par de noches se acostumbran a la forma como se mueven y ajustan sobre la espuma y descubren que es mucho más cómoda que en una cama de resortes o inflable. Este período de ajuste va en la otra dirección también; dormir en otro tipo de colchón cuando estés de vacaciones tardará un par de noches para sentirse cómodo otra vez.

Registros

Aunque los colchones de espuma viscoelástica han existido desde la década de 1990, los colchones de espuma de látex son más nuevos y no tienen un historial probado de durabilidad. Se venden menos colchones de látex, así que no hay muchas experiencias de usuario ni datos registrados. De la información disponible, el látex 100 por ciento natural es mejor que los que son una mezcla de látex natural y sintético.

Peso

Tanto los colchones de espuma viscoelástica como los de espuma de látex son pesados, aunque el látex es más pesado, lo que hace que cambiar las sábanas y tender la cama sea un poco difícil. Mover, girar o voltear un colchón requerirá de dos personas.