Ojos de colores claros

Si cuentas con unos ojos gris pálido, azul grisáceo, verde claro o azul pálido con un tono de piel frío, busca los colores pálidos. Los colores como el rubio platinado o el café muy claro con reflejos aun más claros harán que tus ojos fríos realmente resalten. Si tu tono de piel es un poco más cálido, probablemente tienes ojos avellanados, ámbar, verde o café claro. Mantén los colores pálidos, pero agrega fugaces destellos de fresa, dorado o rojo.

Ojos de colores intermedios

Eres de esa clase de chica con ojos café de la cual Van Morrison canta o tal vez tienes ojos azul oscuro o verdes. De cualquier manera, los ojos con colores intermedios y piel de tonalidad fría combinan bien con un rubio oscuro o con colores café de claro a mediano. Si tienes una tonalidad de piel cálida con ojos avellanados oscuros, verdes, ámbar o topacio, mantente con cafés intensos con destellos rojos o burdeos.

Ojos de colores oscuros

Los ojos oscuros y el pelo oscuro son una combinación hecha en el cielo. Si tus ojos son oscuros y la tonalidad de tu piel es fría, imagina esa taza de café negro que tomas está mañana. Ese es el color de pelo para ti. Si te sientes un poco llamativa, busca reflejos ciruela o burdeos. Para ojos oscuros con piel cálida, el chocolate es tu amigo. Evita los negros y busca cafés intensos y profundos con reflejos rojos o cobres.

Determina la tonalidad de tu piel

La tonalidad de la piel podrá sonar trivial, pero si te equivocas te puede hacer ver mal con ojos hundidos y piel cansada. A mes que quieras el aspecto de muerta-viviente, rápidamente revisa la tonalidad de tu piel mediante sostener un pedazo de papel blanco cerca de tu cara en el espejo, debajo de la luz natural. Si el papel hace que tu cara se vea amarilla, tienes una tonalidad cálida y si el papel te hace ver azul o gris, tienes una tonalidad fría.