Step 1

Separa tu pelo natural alrededor del perímetro y cepilla las extensiones hacia atrás.

Step 2

Enjuaga tu pelo con agua tibia mientras te inclinas sobre el lavabo o una bañera hasta que el merímetro y las extensiones estén mojadas hasta las puntas.

Step 3

Toma una buena cantidad de champú y masajéalo primero en tu pelo natural. Asegúrate de poner espuma en todo el perímetro, la parte delantera, trasera y los costados. Deja que actúe por unos minutos.

Step 4

Lava las extensiones. Comenzando en la parte de arriba y avanzando hasta las puntas, lentamente saca espuma mientras tratas de no enredarlas. Mantén el pelo tan recto como te sea posible mientras frotas. Asegúrate de ver dónde está el hilo en el pelo y no tires de las extensiones.

Step 5

Pon champú en el cuero cabelludo, separando las mechas. Saca espuma gentilemente, ya que tu cuero cabelludo puede estar sensible.

Step 6

Enjuaga tu pelo y repite, prestando atención extra al perímetro de las extensiones.

Step 7

Pon acondicionador una vez que tu pelo esté enjuagado y vuelve a enjuagarlo. Usa una cantidad generosa en las extensiones y la línea del pelo, dado que esta permanecerá expuesta.

Step 8

Seca tu pelo con toalla antes de tratar de peinarlo. Para tu pelo natural usa un peine o cepilo suave para partir el cabello en cuatro secciones y comienza a cepillar cada una con un peine de dientes anchos, comenzando en las puntas y avanzando hacia el cuero cabelludo.

Step 9

Usa un secador de pelo en la configuración alta para secar las extensiones. Para tu pelo natural que está expuesto, usa una configuración media de calor.