Grifo montado en la pared

El tipo de vasija y la posición en la que esté instalada determinará la altura a la que tendrás que montar un grifo de pared. Tendrás que proporcionar un espacio adecuado entre el extremo del grifo y el lavabo para poder lavarse las manos. Puede que tengas que tomar otras necesidades en consideración también. La longitud de la cabeza del grifo debe permitir que el agua fluya directamente en el desagüe para evitar las salpicaduras.

Grifo basado en la encimera

Si eliges utilizar un grifo basado en la encimera, asegúrate de que haya suficiente espacio entre una 1/2 pulgada (1,27 cm) desde el lavabo y la parte posterior de la encimera. Ten en cuenta el espacio necesario para las manos para poder activar las perillas también. Los grifos basados en la encimera ​​para los lavabos se diseñan con un cuello largo. La altura del cuello estará determinada por el tipo de lavabo sobre la encimera que hayas elegido. Estos lavabos van desde casi planos hasta muy profundos. Un lavabo muy profundo requerirá un cuello muy alto con el fin de proporcionar un espacio adecuado para el lavado de las manos y para otros usos.

Instalación

Los diseños de los lavabos sobre encimeras varían, pero cuando se trata de la instalación, tu grifo funcionará mejor cuando es instalado aproximadamente a 1/2 pulgada (1,27 cm) del lavabo. Recuerda que debes utilizar cinta de plomero en las conexiones de la línea de suministro. Lo más importante, las líneas de suministro de agua no están diseñadas para ser apretadas con una llave dinamométrica, así que sólo apriétalas con la mano para evitar el estropeo de la tuerca y otros daños. Otro punto importante a recordar es que la altura estándar de un lavabo de un baño es de 36 pulgadas (91,44 cm) desde el piso. Si tu lavabo se asienta encima del tocador, éste puede necesitar ser más corto que la altura normal.