Cómo enseñar sobre la fe y el arrepentimiento a los niños de SUD

Las escrituras están llenas de historias acerca de la fe y el arrepentimiento.

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La fe y el arrepentimiento son dos conceptos importantes que los niños de SUD (Santos de los Últimos Días) deberían aprender. La fe puede hacer milagros y enseñarles a creer en Dios, y el arrepentimiento es vital para que puedan volver a vivir con su Padre Celestial y Jesucristo. Enseñar estos conceptos puede ser un reto, pero con oración, inspiración y preparación puedes enseñar a los niños lo que significa tener fe y arrepentirse.

La fe

Enseña a los niños la definición de la fe; significa creer y confiar en algo que no puedes ver. Explica la definición a los niños varias veces hasta que puedan repetir las palabras contigo.

Enseña las historias de la Santa Biblia, el Libro de los Mormones y las historias de SUD que describan a gente ejerciendo su fe. Daniel tenía fe en que Dios lo protegería de los leones si hacía lo que era correcto. Los 2.000 jóvenes guerreros fueron valientes y tuvieron fe en que Dios los protegería. Joseph Smith, de joven, vio a Dios y a Jesucristo, y tuvo fe en que lo ayudarían a restaurar la verdadera iglesia, y los primeros pioneros mormones tuvieron una gran fe para unirse a la iglesia y seguirlo.

Pide a los niños que te den ejemplos de su fe, como ocasiones en que han rezado y sus oraciones fueron respondidas.

Sugiere modos en que los niños puedan fortalecer su fe, como rezar, ir a la primaria, estudiar las Sagradas Escrituras y seguir las enseñanzas de los profetas, del Padre Celestial y de Jesucristo.

Comparte tu testimonio de fe contando algunas experiencias personales.

El arrepentimiento

Pregunta a los niños si han hecho algo malo alguna vez. Permite que compartan sus experiencias si lo desean.

Permite que cada niño sostenga una mochila pesada llena de piedras por un momento. Coloca la mochila en la espalda de un voluntario. Haz que el niño camine por algunos minutos y luego retira una piedra por vez hasta que la mochila esté liviana. Explica que los pecados son una carga pesada, como la mochila llena de piedras. Cuando te arrepientes, la carga se aliviana.

Explica a los niños que el arrepentimiento es un proceso de cinco pasos. Debes reconocer lo que has hecho mal, luego confesarlo al Padre Celestial y pedir perdón. Intenta reparar el daño; si haz robado algo, por ejemplo, deberías devolverlo o pagar por ello. Finalmente, debes tratar de no cometer otro pecado y obedecer los mandamientos.

Lee recuentos de las Escrituras sobre personas que han pecado y se han arrepentido. Alma el joven llevó a muchos miembros de la iglesia por un mal camino, por ello el Padre Celestial envió a un ángel a visitarlo. Alma el joven estuvo mudo y debilitado por dos días hasta que se arrepintió. Luego siguió al Padre Celestial y se convirtió en un gran profeta.

Comparte tu testimonio de arrepentimiento y el poder de la expiación.

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