Los efectos que la actitud puede tener en el rendimiento laboral

La forma en que el empleado se siente acerca de su trabajo puede tener un efecto drástico en su desempeño.

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La actitud de un empleado influye mucho en el lugar de trabajo. La forma en que este se siente acerca de su trabajo puede tener un efecto drástico en su desempeño en el lugar de trabajo. La visión que el empleado tiene de su puesto de trabajo a menudo se transfiere directamente a la calidad del mismo. Un empleado con una actitud muy positiva o negativa puede cambiar la dinámica de todos los que trabajan a su alrededor.

Nuevas ideas

Un empleado con una actitud positiva esta lleno de nuevas ideas para mejorar a su empresa. Piensa en ideas que harán que su trabajo sea más eficiente, y quiere compartir estas ideas con sus compañeros de trabajo. Un empleado con una actitud negativa no tiene mucho tiempo para pensar en ideas para mejorar la compañía, ya que su mente está nublada con negatividad. Pasa sus días pensando en lo mucho que le disgusta su trabajo, sus compañeros de trabajo y la empresa para la que trabaja en lugar de crear formas de mejorar su satisfacción laboral.

Orgullo en el trabajo

Si un empleado disfruta de su trabajo y tiene una actitud positiva al respecto, se sentirá orgulloso del trabajo que hace. Este empleado mostrará voluntariamente a su jefe y a otros compañeros de trabajo los proyectos en los que está trabajando sin dudarlo. Un empleado con una actitud negativa no está orgulloso de su trabajo, ya sea porque sabe que no es bueno o simplemente porque no se preocupa por él y por ende no tiene interés en mostrarlo.

Confianza en sí mismo

Un empleado positivo tiene confianza en sí mismo. Disfruta de su empleo y sabe que hace un buen trabajo. Este empleado tiene un buen nivel de autoestima y está dispuesto a asumir nuevos proyectos y probar nuevos procesos y procedimientos porque cree en sí mismo. Si un empleado tiene una actitud negativa, podría no tener mucha confianza en sí mismo. Cuando se le pide que asuma nuevos proyectos, podría parecer poco predispuesto, porque en el fondo cree que lo hará mal.

Establecimiento de objetivos

Los empleados deben tener metas que los motiven a tener éxito. Un empleado positivo establece metas para sí mismo por las tareas que quiere lograr cada día, semana, mes y año. Trabaja duro para lograr estos objetivos porque quiere cumplir con sus estándares de éxito. Un empleado con una actitud negativa no se preocupa por su trabajo, y no tiene ningún interés en el establecimiento de metas. No crea estándares para el éxito por sí mismo, y como resultado no tiene nada hacia lo cual trabajar.

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