Cómo construir una cascada económica sin estanque
Thinkstock Images/Comstock/Getty Images
El agua cayendo es un sonido muy relajante. Ya sea una de tipo enorme como las cataratas del Niágara o de tipo pequeño construida con unos simples materiales, léstas tienen una afable atracción. No precisas un gran lugar o mucha agua para crear una cascada, en un recipiente, éstas sin estanque y las basadas en un riachuelo son combinaciones populares de paisajes.
Step 1
Determina la ubicación de tu cascada sin estanque. Colócala cerca del suministro de agua (al menos donde pueda llegar tu manguera de jardín). Planea que esté ubicada dentro de los 12 pies (365,76 cm) de distancia a un tomacorrientes eléctrico de 110 voltios, para que puedas enchufar la bomba. La opción más económica es utilizar un espacio protegido del clima, cerca de un enchufe. De otra manera, haz que un electricista diseñe e instale la fuente de alimentación eléctrica.
Step 2
Cava un pozo lo suficientemente profundo y ancho como para enterrar el balde que constituye el reservorio, de manera que esté justo debajo del nivel de la superficie del terreno circundante. Para una cascada más ancha, utiliza un contenedor tipo cuba de caucho. Éste determinará cuanta agua puede fluir por la cascada. Apoya el reservorio en el piso tan nivelado como te sea posible. Llena el orificio alrededor con barro, para fijarlo en su posición.
Step 3
Llena el reservorio con agua. Une la manguera a la bomba y estírala sobre el piso. Coloca la sumergible en éste, sosteniéndola del cable de alimentación y de la manguera.
Step 4
Pasa la manguera y cable a través de orificios en la malla de cable o la rejilla plástica. Esta es tu tapa del reservorio. Instala la rejilla sobre éste, presionándola en el piso para que se nivele con la tierra circundante o justo debajo de la superficie. Cubre la rejilla con piedras decorativas para esconder el reservorio.
Step 5
Apila piedras, losas o ladrillos sobre la ladera de tu cascada. Para lograr una posición más segura, construye un montículo de barro partiendo del orificio del reservorio, y presiona piedras dentro de él. Deja algunas pocas fuera de éste para crear una buena caída para el agua. Deja volar tu creatividad y crea escalones para las piedras, una caída vertical, áreas que sobresalgan y espacios que se mojen dentro del barro.
Step 6
Apunta la manguera al medio de las piedras, escondiéndola dentro de la pared de tu cascada. Pon ésta de modo que el agua pueda salir horizontalmente o con un ángulo del extremo de la manguera apenas hacia abajo. Ajústala para asegurar que el agua caerá en el reservorio.
Step 7
Arranca la bomba para que el agua comience a fluir. Ajusta cualquier piedra o la posición de la manguera para modificar el flujo de agua hasta que te plazca.
Referencias
Recursos
Consejos
- Para cascadas pequeñas, utiliza una bomba para fuentes unida a un ladrillo con una buena bandita elástica, y sumérgela en el fondo del reservorio. Para más grandes, utiliza una bomba de estanque.
- El cable galvanizado para pollo es bueno para la malla de alambre y para ser utilizado como tapa del reservorio.
Advertencias
- Si el agua que regresa no llega al reservorio sino que se filtra en el terreno circundante, estás en riesgo de quemar tu bomba, a medida que el nivel de agua en éste se torne demasiado bajo.
Sobre el autor
Writer/Musician
Créditos fotográficos
Thinkstock Images/Comstock/Getty Images