Step 1

Escoge colores que complementen el cuero negro. Si tienes una pieza protagonista en este material, lo ideal es que el resto de los colores funcionen bien con ella. Mucha gente comete el error de escoger otros colores fuertes como verde botella, borgoña u ocre brillante para combinar con la intensidad del negro, pero en realidad es mucho más sabio usar colores neutrales para que el cuero resalte por sí sólo. Los elementos principales de la habitación son los que deben ir en colores neutrales, como arena o beige en las paredes y tonalidades tierra en los pisos.

Step 2

Escoge decoración para la sala que contraste con el cuero. No hay nada que resalte los muebles negros más que elementos contrastantes. Esto no quiere decir que el espacio debe ser completamente blanco y negro (a menos que este sea el motivo que te gusta). Otra manera de hacer contraste es utilizando mesas de vidrio y acentos de acero.

Step 3

Equilibra la habitación con otros accesorios negros, como tapetes o alfombras. Si tienes negro a un lado de la habitación, puedes balancearlo poniendo elementos negros en otras áreas. Un tapete que sea negro, o con detalles en ese color dará equilibrio a la habitación. Las patas de las mesas o bases de lámparas en negro también ayudan a esto. Usar marcos de esa tonalidad para tus piezas de arte también generan un ambiente balanceado.

Step 4

Dale un aire étnico a la sala. Este tipo de decoración es genial para dominar una combinación de colores fuerte. Ya sea que prefieres diseños Asiáticos, Africanos, Indios o Caribeños, este será el tema de decoración principal, haciendo que el mobiliario negro pase a un lugar secundario. Lo más importante es ejercitar la moderación, no para sobrecargar el espacio, sino para complementar los elementos existentes.