Step 1

Sostén a tu bebé por encima de tu hombro. Algunos consejos acerca de hacerlo eructar recomiendan sostener al niño erguido sobre tu regazo, pero una posición sentada puede hacer que despierte. La posición por encima del hombro puede hacer que sea más sencillo que tu bebé permanezca dormido mientras eructa.

Step 2

Frota suavemente o da golpecitos a la espalda y hombros de tu bebé con el talón de tu mano. Haz esto lo más suavemente posible de modo de no despertarlo. Usa tu otra mano y brazo como apoyo. Puedes querer sentarte en una mecedora y mecerte lentamente mientras haces esto.

Si tu bebé despierta durante el proceso, este método gentil, especialmente acompañado por un movimiento regular al mecerse, debería ayudar a que se vuelva a dormir fácilmente.

Step 3

Otro método es colocar a tu bebé boca abajo a través de tu regazo. Usa una mano para proveer apoyo y con la otra, frota la espalda de tu bebé con un delicado movimiento circular. Sé muy gentil y cuidadoso mientras colocas a tu bebé en esta posición. Esta es relajante para tu bebé y también puede ser usada para arrullarlo si es quisquilloso.

Step 4

Toma a tu bebé por debajo de sus brazos, sosteniéndolo de manera segura, y balancéalo como un péndulo. Este método funciona contra el gas que queda atrapado en el esófago. Balancearlo suavemente ayudará a que el gas vaya hacia arriba y salga del esófago (ver Referencias 3).