Taxonomía y hábitat

Las dos grandes familias de ranas arborícolas están clasificadas como: las ranas arborícolas del Viejo Mundo (Familia Rhacophoridae) y las del Nuevo Mundo (Familia Hylidae). Mientras la mayoría de ellas pasan gran parte de sus vidas en los árboles, muchos miembros de estas familias viven en el suelo de los bosques o incluso bajo tierra en los trópicos y nunca se aventuran hacia los árboles.

Condiciones medioambientales

Las ranas arborícolas se desarrollan en los trópicos debido a las condiciones de estabilidad medioambiental. Los biomedios tropicales son ambientes cálidos y húmedos a lo largo del ecuador. Los ambientes tropicales reciben grandes cantidades de lluvia constante durante todo el año, lo que, junto con la abundante luz solar, hacen de los trópicos un rico y fértil hábitat para muchas plantas y animales. Las zonas tropicales contienen la mayor concentración de biodiversidad del planeta, y las ranas arborícolas no son la excepción. El mayor número de especies de ranas arborícolas se encuentra en los trópicos, donde aprovechan el tamaño de la cubierta forestal, la diversidad de plantas arbóreas y la abundancia de fuentes de alimento en los árboles.

Características

Las ranas arborícolas están especialmente adaptadas para la vida en los árboles. Ellas son típicamente pequeñas ranas que tienen piernas delgadas y largos dedos con discos distintos en la punta de cada uno. Estas características las ayudan a agarrarse de pequeñas ramas y hojas mientras suben por los árboles. Aunque son diferentes en apariencia, muchas de ellas son de color verde brillante o de color marrón, que sirve como camuflaje para el hábitat arbóreo y las ayudan a mantenerlas a salvo de los depredadores. Algunas especies, sin embargo, tienen una coloración muy brillante que sirve como una advertencia de la posible toxicidad y puede confundir a los depredadores lo suficiente para que la rana arborícola pueda escapar.

Reproducción

Las ranas arborícolas desarrollaron algunas ingeniosas maneras de reproducirse en los árboles. Algunas de ellas nunca se van de los árboles para procrearse, mientras que la reproducción es la única vez que otras especies toquen el suelo del bosque. Los comportamientos reproductivos de estas ranas son tan diversos como su número de especies. Algunas ranas arborícolas del Nuevo Mundo, como las ranas marsupiales (del género Gastrotheca), llevan sus huevos en pequeñas bolsas en la espalda hasta que estén listos para eclosionar en renacuajos. Otros, incluyendo ranas arborícolas de nido de espuma (del género Chiromantis), se aferran a las ramas de los árboles y frotan sus piernas juntas violentamente para crear un nido de espuma mientras están apareándose. Los huevos fertilizados se desarrollan en la espuma hasta que se convierten en renacuajos, cuando abandonan el nido y van al agua de abajo para continuar su metamorfosis. Muchas ranas arborícolas tropicales ponen sus huevos en el agua que se acumula en las plantas en su hábitat arbóreo.

Algunos datos interesantes

En adición a sus fuertes e hipnóticos llamados, las ranas arborícolas tropicales también pueden comunicarse entre sí mediante las vibraciones de las ramas de los árboles. Golpeando sus piernas contra una rama hasta 12 veces por segundo, algunas ranas pueden enviar señales de advertencia a las ranas rivales que invaden su territorio o para atraer a una pareja potencial.

La rana gigante de hoja (bicolor Phyllomedusa), que se encuentra en la selva amazónica, hace un nido de hoja en la cual los huevos se desarrollan y luego caen en el agua debajo. Estas grandes ranas arborícolas también son utilizadas por los indígenas como una ayuda en la caza. Los nativos se queman a sí mismos y luego frotan las secreciones cerosas de la rana gigante de hoja en sus quemaduras para inducirse a un estado de euforia que los ayude en la caza. Las toxinas de esta rana son objeto de una gran investigación médica, ya que se cree que tienen varias aplicaciones curativas.