Step 1

Apaga y desenchufa el refrigerador. También es recomendable que cortes el suministro de energía de la cocina para trabajar mejor.

Step 2

Encuentra el sector donde va instalado el termostato. Si tu refrigerador ya tenía uno, puedes retirarlo e instalar el nuevo en ese mismo lugar.

Step 3

Vacía el refrigerador para poder hacer la instalación. Debes sacar los estantes si el termostato irá instalado en el interior. Un destornillador plano te será útil para quitar los estantes haciendo palanca. En caso de que realices la instalación del lado de afuera en la parte posterior del refrigerador, asegúrate de moverlo para alcanzar el estante del piso y deshacerte de cualquier obstáculo.

Step 4

Retira el termostato viejo. Con un alicate de punta fina saca los cables ubicados detrás del termostato. Debes quitar los conectores deslizantes; asegúrate de tomar los cables lo más cerca posible de los polos para evitar romperlos o dañarlos. Luego saca las abrazaderas y utiliza un destornillador para retirar el termostato de su lugar.

Step 5

Coloca el termostato nuevo en el lugar adecuado. Con el destornillador ajusta las abrazaderas y los tornillos. Así, el termostato quedará firme en su lugar.

Step 6

Conecta los cables del termostato a los polos del refrigerador. Inserta los conectores deslizantes de los cables dentro de los polos. De esta manera, el termostato nuevo quedará colocado en el refrigerador y podrá funcionar.

Step 7

Coloca las estanterías nuevamente. Conecta el enchufe y espera un momento antes de encender el refrigerador y verificar si funciona el termostato.