Cosecha semillas

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Si has plantado un girasol gigante, no olvides cosechar las semillas antes que de las aves lo hagan por ti. Las hojas a lo largo del tallo pueden aún estar verdes; comienzan su declive de fin de temporada luego de que los pétalos amarillos rodeando la cabeza llena de semillas mueran o ya hayan caído. Corta el tallo aproximadamente a 12 pulgadas (30 cm) desde la cabeza cuando la parte posterior de esta sea de un amarillo dorado o marrón, los pétalos estén muertos y las semillas estén regordetas. Cuelga la cabeza en un área resguardada y seca, y luego coloca las semillas aflojadas en un contenedor para que se sequen por completo.

Enfermedad

Desafortunadamente, una enfermedad puede matar tus girasoles antes de tiempo. El moho mildiú y oídio (hongos que forman parches plateados y polvorientos sobre las hojas y tallos) usualmente no causan daños severos. La verticilosis y la Sclerotinia sclerotiorum, sin embargo, marchitan tus girasoles, forman parches muertos en las hojas o tallos y pueden afectar plantas cercanas. Si un girasol muere por enfermedad, arráncalo inmediatamente y deséchalo en la basura. Nunca hagas compost con girasoles enfermos.

Tallos y plantas

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Una vez que tu girasol anual muere, simplemente arranca la planta y retira el exceso de tierra de las raíces. Los girasoles, especialmente las variedades más altas, usualmente forman una única raíz principal y una tupida manta de raíces secundarias. Las plantas secas de tamaño mediano no ofrecerán demasiada resistencia, pero las plantas más grandes pueden aferrarse tenazmente al suelo; riega el área antes de arrancarlas para aflojar el terreno. Si tus girasoles tienen un tallo único y leñoso, no forcejees con él. En cambio, toma la parte superior del tallo y tira hacia el costado, usando un movimiento de palanca para arrancar la base del suelo.

Otras consideraciones

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Usa guantes al manipular tallos de girasoles. Pequeñas espinas cubren los tallos, y aunque no se ven impresionantes, causan fácilmente irritación en la piel. Si las hormigas rojas o las avispas frecuentan tu jardín, ten cuidado si tus hojas aún están verdes; las hormigas y las avispas a menudo cosechan melaza de los pulgones ocultos en la cara inferior de tus anchas hojas de girasol. Quita cualquier tallo grande y duro antes de añadir girasoles muertos a tu pila de compost. Los tallos no se descomponen fácilmente y se convierten en na molestia.