Nabos crudos

Puedes comer los nabos crudos cuando su diámetro es inferior a 3 pulgadas (7,62 cm) porque su pulpa es tierna y de sabor suave. Cuando crecen más, el sabor comienza a transformarse, volviéndose agrio. Resulta desafiante cosechar nabos jóvenes en el tiempo correcto porque la temporada de crecimiento dura solo dos meses y pueden madurar y pasarse muy rápidamente. En los mercados de granjeros y los negocios de comida natural hay una mayor probabilidad de conseguir nabos cosechados tempranamente, que en un almacén tradicional.

Componentes de crucíferos

El Instituto Nacional de Cáncer recomienda comer vegetales crucíferos diariamente. Ciertos componentes en estos vegetales, llamados isotiocianatos, protegen del cáncer a las células de la vejiga, de acuerdo con los científicos del Parque de Investigación Roswell en Buffalo, Nueva York. Los científicos estudian actualmente procesos para vincularlos con otros tipos de prevención de cáncer. Mientras tanto, agregar nabos crudos a tu dieta puede ser una decisión inteligente.

Recomendaciones para servir

La clave para disfrutar vegetales crudos es la técnica de cortado, porque se puede aumentar su atractivo cortándolos en tamaños y formas que los hagan agradables visualmente. Un nabo cortado como un anillo y atravesado por el centro con un palillo de zanahoria se convierte en un bocado para niños que ofrece vegetales crudos saludables con un mango comestible. Corta nabos frescos en juliana y sírvelos con espárragos, brócoli joven, calabazas de verano y una salsa de aderezo de hierbas.

Cómo pelar

Los nutrientes de la piel del vegetal proveen un incentivo para dejarlo sin pelar. Afortunadamente, esto es posible para los nabos jóvenes. La capa exterior comestible provee nutrientes, color y textura crujiente a la sabrosa pulpa. Friega bien los nabos, que como son raíces pasan su período de crecimiento inmersos en la tierra.