Un sustituto de tomates triturados para la salsa de tomate

Cualquier producto derivado del tomate puede sustituirse en las recetas.

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Las recetas de salsa de tomate llevan tomate triturado, pero el tipo de tomate que utilices es una cuestión de gusto. La mayoría de los tomates enlatados, así como los tomates frescos hacen una excelente salsa. Las diferencias en textura y sabor tienen que ver con los tomates que se utilizan, y las recetas pueden modificarse fácilmente para encajar con tu gusto o con el contenido de la alacena.

Salsas con trozos

Las recetas que llevan tomate triturado se preparan para encontrar trozos de tomate en ellas. Hay varios productos derivados del tomate que logran una textura similar. Los tomates enteros, que a menudo, se denominan San Marzano, pueden triturarse en la lata y esto les dará la misma consistencia que los tomates triturados. Muchos cocineros italianos prefieren tomates San Marzano a cualquier otra variedad porque son más firmes y tienen pocas semillas, lo que los hace ideales para una salsa deliciosa. Los tomates enlatados en cubos también pueden triturarse para salsas pero son más acuosos que los San Marzano, por lo que el resultado será una salsa más suelta. Los tomates en compota se utilizan para hacer chile. Se los sazona con ají picante y se los coloca enteros o en trozos grandes. Para hacer salsas más frescas utiliza tomates frescos triturados enteros. Para una salsa más espesa retira las semillas. Si la piel es muy fibrosa, pela los tomates antes de triturarlos con las manos o con el procesador de alimentos.

Salsas suaves

Los tomates triturados y sus sustitutos hacen excelentes salsas con trozos de tomate. Para salsas más suaves o delicadas utiliza puré de tomate enlatado. A diferencia de las salsas preparadas para pastas, el puré de tomates se hace solo con tomates. Puedes hacer este puré poniendo en el procesador de alimentos tomates enteros, en conserva, frescos o triturados. El extracto de tomate, a diferencia de otros productos derivados del tomate, es muy concentrado. Se necesita una cantidad muy pequeña para proporcionar sabor. Debe diluirse con otros productos derivados del tomate, en caldo y otra salsa líquida.

Receta de salsa de tomate

Los tomates San Marzano son los preferidos de muchos chefs para hacer salsas marinara. Para hacer una salsa marinara a partir de tomates enteros enlatados u otro producto derivado del tomate, también enlatado, pon en el procesador 28 onzas (800 gr) para conseguir la suavidad deseada o estrújalos con las manos para una salsa con trozos. En una sartén grande, saltea 4 cucharaditas de ajo picado en 4 cucharaditas de aceite de oliva a fuego medio. Agrega 1 cucharadita de albahaca picada y de perejil italiano de hoja chata, también agrega copos de peperoncino para saborizar. Cocina por un minuto y agrega los tomates. Sazona con sal, pimienta y una pizca de azúcar. Lleva la salsa a hervor y luego a fuego lento por 15 minutos.

Cocinar con tomates frescos

Los tomates frescos tienden a llegar al punto de maduración entre mediados y fines del verano en Estados Unidos, aunque en varias regiones hay tomates frescos desde inicios de febrero y fines de noviembre. Los tomates maduros de estación son ideales para salsas dulces y frescas, pero aún los que no están tan en su punto justo pueden usarse para preparar deliciosas salsas. En plena estación puedes usar tomates dulces y frescos para hacer salsas crudas. Corta los tomates en cubos y separa las semillas, adereza con aceite de oliva extra virgen, hierbas frescas, sal y pimienta. Sirve sobre pasta tibia, en una bruschetta o tostada, con carne asada y vegetales. Cocinar levemente los tomates maduros acentúa su dulzura y deja un retrogusto acaramelado. Saltea y cocina a fuego lento con ajo, hierbas y cebollas cortadas solo lo justo para que espese y sirve sobre pastas o carne y vegetales asados. En el caso de los tomates que no son de estación cocinarlos a fuego lento puede convertirlos es una salsa dulce que disimule las imperfecciones de los tomates. Corta tomates y cocínalos sin semillas por horas o días dependiendo del nivel de caramelización que quieras lograr. La cocción prolongada destruirá la piel fibrosa. Agrega los sabores que más te gusten y úsala para pizzas o pastas o sobre una variedad de platos. Congela la salsa cocida en recipientes aptos para descongelar y disfruta de la salsa hasta la próxima temporada.

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