Montantes

La instalación de paneles ranurados es simple y el uso de tornillos adecuados depende del tipo de montantes presentes en la pared donde se montarán los paneles. Los montantes de madera son los que generalmente se utilizan en edificios residenciales, mientras que en estructuras comerciales, usualmente están presentes los montantes de metal. Una herramienta para encontrar montantes puede localizar e identificar los montantes. También necesitas cortar las ranuras según las especificaciones deseadas e, idealmente, bosquejar la instalación antes de comenzar a taladrar.

Montantes de madera

En el caso de la presencia de montantes de madera, necesitas tornillos lo suficientemente largos para atravesar los paneles ranurados y así fijarse firmemente a los montantes. Generalmente, dichos tornillos miden 2,5 a 3 pulgadas (6 a 7,5 cm) de largo, y poseen filetes gruesos para ingresar y anclarse a la madera. Un tornillo de filete grueso también es más fácil de instalar que sus equivalentes finos.

Montantes de metal

En los montantes de metal se deben utilizar tornillos de filete fino, generalmente de 2,5 a 3 pulgadas (6 a 7,5 cm) de largo, para fijar los paneles ranurados en los montantes. Los tornillos de filete fino poseen una punta filosa, lo que les permite penetrar el montante de metal. Aunque puede funcionar, un tornillo de filete grueso no se fijará con fuerza al montante, por lo que se puede aflojar la instalación.

Tornillo autorroscante

Ya sea ante la presencia de montantes de madera o metal, los tornillos deben ser autorroscantes. Existen pequeños espacios en los filetes de los tornillos autorroscantes, que crean su propio dibujo en los paneles de yeso y montantes a medida que avanzan. Además de los tornillos, si la instalación es permanente, colocar una banda adhesiva en el dorso de cada panel lo fijará aún más.