Tipos de filtración

De los tres tipos principales de filtración (mecánica, biológica y química) el carbón realiza la variedad química de limpieza de agua. Al quitar los químicos peligrosos, incluyendo el cloro y algunos metales pesados, el carbón complementa las esponjas o hilo de filtración mecánica (que quitan grandes partículas de materia y residuos) y los discos o cilindros cerámicos de filtración biológica (que alientan el crecimiento de bacterias benéficas que consumen el peligroso amoníaco y promueve el sistema inmunológico saludable de los peces).

Cómo trabaja el carbón

Las características del carbón hacen que sirva como una esponja natural, absorbiendo los químicos peligrosos y aislándolos sin peligro hasta que quitas y limpias el carbón o lo reemplazas.

Claridad del agua

La materia particular del agua absorbida por el carbón también contribuye a aclarar el agua del tanque, mejorando la estética del acuario.

Limpiar y reemplazar

Por todo lo que agregan a la filtración de aire, las propiedades de limpieza química del carbón tienen sus límites. El carbón activo se desgasta con el tiempo a medida que absorbe su capacidad de químicos. Puedes limpiar el carbón una o dos veces y volver a colocarlo en el tanque pero finalmente deberás reemplazarlo por uno nuevo. Limpiar o reemplazar el carbón activo al menos una vez al mes asegura una filtración química consistente.

Cuándo no utilizar carbón

Las cualidades absorbentes del carbón hacen que sea un obstáculo cuando se intenta tratar peces infectados por enfermedades. El carbón activado absorbe muchos tipos de medicinas para peces, lo que significa que deberás quitarlo cada vez que estés tratando a un pez enfermo. Al final de los ciclos de tratamiento, volver a introducir el carbón en el filtro ayuda a quitar el exceso de productos farmacéuticos.