¿Qué vino sabe bien con la lasaña?

Los ingredientes de la lasaña determinarán el emparejamiento con el vino.

white wine and red wine image by jimcox40 from Fotolia.com

Tanto el vino como la lasaña son opciones populares para beber y comer. Son deseables en la mayoría de las mesas italianas y en las de muchas personas alrededor del mundo. Emparejar el vino correcto con la lasaña que vas a comer es esencial para tener una cena o almuerzo de alta gama que todos puedan disfrutar. Primero necesitas decidir qué habrá en la receta de la lasaña que comerás, ya que esto facilitará mucho el proceso de emparejamiento con el vino.

Tipos

El vino es disfrutado en todo el mundo como una bebida que mejora la comida. La mayoría de los vinos tienen sabores y gustos diferentes, por lo que la bebida apropiada se determina mediante el tipo de alimento que se sirve. La lasaña típicamente se hace con ricos quesos blancos como el mozzarea y el ricotta y se realza con salsas de tomate dulces y fuertes. Entre las variantes de la lasaña se encuentran las versiones sin carne con salsa de tomate y queso solamente y la lasaña vegetal que cuenta con verduras al vapor como las espinacas.

El vino nunca debe dominar el distintivo y fuerte sabor italiano de la lasaña. Un vino ligero como el rosado o el blanco es el perfecto acompañante de una condimentada lasaña, y algunos vinos entre oscuros y claros como el Chianti también son buenos acompañantes para la mayoría de sabores y variantes de dicho platillo.

Beneficios

El beneficio de emparejar vino y lasaña es que durante la cena se puede disfrutar de la combinación de ambos sabores. Un vino más oscuro complementará la lasaña en vez de quitarle su sabor. La lasaña rara vez tiene un sabor fuerte a ajo, pero el vino puede quitarle la mayor parte del aroma de esta especia. Los efectos antioxidantes de los tomates y el vino pueden ayudar a luchar contra las enfermedades.

Advertencia

Beber vino y comer una excesiva cantidad de lasaña puede ocasionar hinchazón y malestar abdominal. La combinación de ambos también puede generar gas que queda atrapado. Una tableta de antiácido suave debe reducir la acidez o el malestar estomacal en caso de que ocurra lo anterior.

Potencial

Si se lleva a cabo una cena en una fiesta o una reunión, el vino siempre es una indulgencia cómoda y bienvenida para tener a disposición de los visitantes. La mesa puede ser adornada mostrando copas de vino que generen sustancia y varianza, y pueden crearse puntos focales con botellas y copas además de piezas decorativas para todos aquellos que se reúnan alrededor de la mesa. El vino puede ser una forma muy barata de entretener a tus visitas siempre y cuando dicha bebida esté bien emparejada con la lasaña. El vino puede comprarse a un precio bastante barato.

Características

Las características del vino que van bien con la lasaña pueden determinarse tan solo con su apariencia. Si el vino es claro suele ser menos acre. Si se elige un vino claro en oposición a un oscuro y profundo de color burdeos como el Cabernet Sauvignon o el Merlot, el vino probablemente fluirá más suavemente con la lasaña. Por otro lado, si el platillo no tiene un sabor fuerte y es algo blando, sin carne y con mucho queso, un vino de color más profundo se adaptará mejor a la lasaña y al sabor en conjunto de ambos. El vino y la lasaña se ven muy bien al presentarse en la mesa con la copa de vino a un lado del plato de lasaña.

eHow en espanol
×