Métodos de construcción en seco con bloques de concreto apilados

Los bloques de concreto se pueden apilar en seco.

Jupiterimages/Photos.com/Getty Images

Los bloques de concreto se usan para construir cercas de privacidad, cimientos, sótanos y paredes para casas, galpones y otros edificios. Un método de construcción tradicional es unir los bloques con mezcla, de manera parecida a la que se construye con ladrillos. Una alternativa es el apilado en seco, colocando los bloques en su lugar sin juntas de mortero y asegurándolos sobre la superficie con un cemento de contacto y mezcla para concreto en los orificios de los bloques. El apilado de bloques en seco puede lograr paredes fuertes y bastante sólidas.

Base de concreto

El apilado en seco comienza con una construcción de concreto sólido que funciona como base para la pared, con barras de acero de refuerzo colocadas en el hormigón con 4 pies (1,2 m) de distancia entre sí, de forma que los orificios de los bloques los alineen sobre ellas. Asegúrate de que haya una barra en cada esquina o final de pared y en cada ubicación de una puerta o ventana. Usa bloques con extremos sólidos, en lugar de los bloques con extremos indentados que se usan en paredes con mortero.

Mortero sobre la base de hormigón

Deja que el hormigón cure por una semana antes de comenzar a apilar los bloques. Incluso en el apilado en seco deberás usar algo de mortero, la primera capa o capa base de bloques tiene que asentarse sobre la base de hormigón y nivelarse, con los bordes de los bloques muy juntos unos a otros pero sin mortero en la unión. Esta capa base debe estar nivelada sobre la pared con el nivel superior de los primeros bloques. Los bloques se deben colocar con los orificios pasando por las barras de refuerzo, en donde estas estén instaladas.

Bordes juntos y superpuestos

Los bloques se deben colocar con los bordes presionándose firmemente unos a otros, sin espacios en el medio. Lo mejor es trabajar de un extremo a otro y colocar el último bloque en el centro para evitar que la pared sea ondulada. Los bloques se deben superponer, de forma que cada uno ocupe la mitad de otros dos bloques por debajo. Esto se hace colocando un bloque de esquina en un ángulo de 90 grados donde se unen dos paredes, o comenzando cada pared, donde iría un bloque completo, con un medio bloque.

Refuerzo horizontal

Para una pared de más de cinco bloques de altura, usa un bloque especial en la quinta fila, que tenga una ranura en la parte superior para acomodar una barra horizontal de refuerzo a través de la longitud de la pared. Coloca juntas de esquina ancladas a 90 grados taladrando un orificio en una junta lo suficientemente grande para albergar un trozo de barra de 1 pie (30 cm) de largo, que vaya desde uno de los bloques hacia la cavidad en el bloque perforado.

Mezcla

Una vez que hayas colocado la última fila de bloques, vierte mezcla para hormigón en todas las esquinas o aberturas de los extremos y en cada orificio con barra de refuerzo. Llena otras aberturas con arena o mezcla para hacer que el interior de la pared sea sólida. Añade una capa de cemento o pegamento para vigas para sellar la parte superior de la pared. Inserta las vigas para el techo en el pegamento para vigas.

Cemento superficial

Cubre ambos lados de la pared con cemento de superficie, un tipo especial que se refuerza con fibra de vidrio, de 1/8 de pulgada (0,3 cm) de espesor. Asegúrate de que el cemento llene cualquier pequeña grieta en los bloques. Distribuye este con una espátula. Luego de que la superficie de la pared se haya cubierto con una capa plana de cemento, puedes agregar una capa de acabado para obtener la textura que desees. El cemento necesita mantenerse húmedo por algunos días para que pueda curar.

eHow en espanol
×