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Coloca en el suelo una hoja de papel o periódico lo suficientemente grande para la silla. Esto evitará que la grasa manche la moqueta de tu piso.

Voltea la silla de oficina del revés, de forma que la parte superior del respaldo y la parte delantera del asiento se apoyen sobre el suelo. Localiza el clip que está en el eje central de la base de la silla.

Tira del clip del eje central de la base de la silla con un destornillador plano. Haz palanca sobre el clip con el destornillador y apártalo a un lado. Saca la arandela plana del eje y déjala a un lado.

Coloca una llave de tubo en el extremo del cilindro de gas y gira suavemente en cualquier dirección para soltar el cilindro. El cilindro de gas tiene una forma cónica en el extremo que ajusta en un agujero de la misma forma en la base de la silla. El movimiento giratorio ayudará a liberar la parte superior del cilindro de gas de la silla.

Tira directamente del cilindro de gas del eje de la silla. Es una buena idea usar un trapo mientras tiras del cilindro de gas porque tendrá algo de grasa en el exterior.

Coloca el nuevo cilindro de gas en el eje de la silla con la varilla cónica hacia la base de la silla. Asegura el cilindro a la silla con la arandela y el clip de sujeción.

Pon derecha la silla y siéntate en ella para enganchar el extremo cónico en la base. Eleva la silla con la palanca a la posición adecuada.