Las camisas de vestir están hechas para lucir bien, por lo que es importante no arruinarlas durante el proceso de lavado. Las camisas blancas y las camisas negras de vestir requieren de distintas temperaturas de agua y diferentes productos para lavarlas, por lo que no puedes ponerlas juntas en la lavadora con una gran carga. Primero debes separarlas de acuerdo al color, las blancas, las de colores y las negras y luego lavar las camisas blancas y negras en forma acorde.

Ajusta la lavadora con la temperatura adecuada para el color de las camisas que estás lavando. Para las camisas de vestir blancas, usa agua caliente y para las negras usa agua fría. Las que tienen una mezcla de blanco y negro se deben lavar con agua fría para que el color negro no se desvanezca.

Ajusta la máquina en un ciclo suave. Agrega detergente al agua de acuerdo a las instrucciones de la etiqueta del producto. Si la camisa es toda blanca, agrega un poco de cloro de acuerdo a las instrucciones de mezclado del fabricante. Si es negra o una mezcla de blanco y negro, evita usar cloro o una lejía apta para la ropa de color, ya que ambos productos atenúan el color.

Deja las camisas durante un ciclo de lavado completo. Quítalas rápidamente de la lavadora y cuélgalas en perchas para que se sequen. Si abrochas los botones antes de secarlas, ayudarás a que mantengan su forma.