Step 1

Pide detalles. Si alguien dice la verdad, no tomará ni un respiro cuando pidas detalles específicos de la historia que te está contando, mientras que un mentiroso puede pausar un momento para reunir sus pensamientos y decidir cómo proceder. Alguien que miente puede irritarse y preguntar por qué haces tantas preguntas, porque sabe que entre más información proporcione, tiene mayor probabilidad de caer.

Step 2

Busca lenguaje corporal de engaño. Las señales no verbales de la deshonestidad incluyen gestos manuales excesivos, evitar contacto visual, lamer los labios y tocar la nariz y la boca. Una persona que dice la verdad raramente muestra este tipo de comportamiento nervioso.

Step 3

Presta atención a sus ojos y el tono de su voz. Debe verse y sonar como es usual en una persona que dice la verdad. Sin embargo, los niveles de estrés se elevan cuando alguien dice una mentira; las pupilas dilatadas y un tono más alto en la voz son señales de que la persona con la que estás hablando se siente ansiosa y puede estar tratando de engañarte.

Step 4

Vuelve a tratar el asunto después. Si hiciste muchas preguntas durante la narración inicial de la mentira sospechada, la persona podría no recordar todos los particulares que te dijo. Un cambio en alguno de los detalles de la historia o detenerse para recordar lo que dijo originalmente podría probar que no fue completamente honesta.

Step 5

Confía en tus instintos y piensa en si su comportamiento coincide con sus palabras. Muchas personas se permiten ser engañadas porque es esa la mentira lo que quieren escuchar. Sé honesto contigo mismo y considera si la historia y el comportamiento de la persona mientras la contaba tienen sentido cuando se observan objetivamente.