Semillas y plantas híbridas

Si buscas uniformidad, las plantas híbridas son la mejor opción. Estas plantas se crean mezclando dos o más variedades de una planta para formar una nueva. Por ejemplo, si mezclas dos tipos de tomates diferentes y obtienes una nueva planta, esa planta es un híbrido. Aunque algunas plantas híbridas han existido por años, como la variedad de tomates híbridos, algunas otras son nuevas. En la mayoría de los casos, una primer generación tendrá una marca que diga F1 para denotar su estado. Hoy, los híbridos sirven mayormente para producir frutas, vegetales o flores de color y tamaño uniforme, algo deseado por todos los supermercados y otros vendedores, pero puede dar como resultado, además, la pérdida de sabor o fragancia. Las semillas de una planta híbrida, en especial las de una planta de primera generación, pueden no producir una segunda generación que tenga exactamente el mismo color, tamaño o tipo de fruta y, en muchos casos, las semillas de las plantas híbridas son estériles.

Semillas y plantas autóctonas

Para tener un poco de herencia e historia en tu jardín, puedes cultivar plantas y semillas autóctonas. Este término para las semillas y plantas, por lo general se refiere a las plantas que han sido cultivadas por muchas generaciones, abarcando un período de al menos 50 años. A diferencia de las semillas y plantas híbridas, las autóctonas son variedades de plantas nativas que no han sido alteradas por el hombre, y cuyas semillas pueden guardarse por cada generación y plantarse al año siguiente. EL jardinero no necesita comprar semillas para el año entrante, ya que su mejor opción es la semilla autóctona.

Plantas y semillas de polinización abierta

Cuando la mayoría de las personas piensa en semillas y plantas autóctonas, también piensa en semillas y plantas de polinización abierta. A diferencia de las semillas híbridas, las autóctonas son de polinización abierta, pero no todas las plantas y semillas de polinización abierta son autóctonas. Aunque puedas recolectar semillas de plantas autóctonas y de polinización abierta y plantarlas al año siguiente, las plantas autóctonas han sido siempre así y han crecido así por al menos 50 años. Sin embargo, una planta de polinización abierta no requiere tiempo de distinción.

Semillas y plantas modificadas genéticamente

Si encuentras una planta o semilla en la tienda de tu zona que dice que es autóctona, no está genéticamente modificada, pero es muy probable que tampoco lo esté la planta híbrida. Las semillas híbridas se crean mezclando la genética de dos plantas naturalmente, sin modificar el ADN de las plantas. Las plantas y semillas modificadas genéticamente han estado en las noticias porque muchas empresas importantes, como Monsanto, venden semillas genéticamente modificadas, que producen plantas genéticamente modificadas para jardineros. Sin embargo, las semillas modificadas genéticamente, que tienen resistencia a las enfermedades y a los químicos, son más caras y no se venden normalmente a vendedores de tiendas pequeñas o a jardineros que usan químicos y sólo necesitan producir muy poca cantidad.